Este lunes Marcelo Ríos explotó en redes sociales y se refirió en duros términos a Juan Cristóbal Guarello, a raíz de una polémica entre Francisco Muñoz, alias“Pancho Malo” y el periodista.
El Premio Nacional de Periodismo Deportivo lanzará en abril el libro “País Barrabrava”, en el que se refiere a “Pancho Malo” como “un muchacho de clase media acomodada, de ideas de ultraderecha”.
El barrista anunció que demandaría a Guarello y ahí es donde apareció el ex tenista quien desató su rabia contra Guarello: “Tira mentiras y después se esconde el maraco”.
Pero no sólo eso, después avivó una supuesta rivalidad entre el periodista y el ex seleccionado nacional, Eduardo Bonvallet: “Lo que haga ‘Pancho Malo’ no me interesa. Yo hablo de Guarello, que sé la mierda de persona que es. Bonvallet era el único que decía la verdad pero a su manera, y se las decía al matorral de cejas de Guarello”.
Tras los dichos del ex número uno del mundo, salieron “guarellistas” y “bonvalletistas” a darse con todo en redes sociales, pero lo cierto es que esa rivalidad ya no existe.
Así lo confirmó el mismo Guarello en 2015, días después de la muerte de Bonvallet. En esa ocasión reconoció los méritos del ex futbolista.
“Era un jugador que los compañeros lo querían mucho, porque era muy ocurrente, era divertido. Ese jugador yo lo admiré y yo lo vi. Una vez en el estadio de San Felipe, cuando la gente lo empezó a insultar, yo me sentí mal. Yo tenía 14 años”, recordó.
Sobre su faceta como comentarista, señaló: “Yo le reconozco méritos a Bonvallet, fundamantalmente que él desde la posición de ex futbolista haya roto el tabú de criticar a sus colegas”.
“Era un tipo que sabía de fútbol obviamente, conocía la interna, tenía olor a camarín. Era una persona muy ingeniosa, era chispeante y tenía habilidades naturales por las comunicaciones”, añadió.
Eso sí, no olvida el daño que hizo Bonvallet: “Lo que no puedo elogiarle son los niveles de agravio y ensañamiento con ciertas personas, algunas de ellas, que en su época de jugador fueron sus amigos. Lo que hizo con Pellegrini, nunca se justificó muy bien, salvo por un tema personal. Fue muy injusto, prestó oídos a rumores y luego los tiró como certezas”.
“A mí me dijo que yo había estafado a mi padre, que yo le había robado una plata para comprarme una moto, una serie de tonterías increíbles. Que me sacaban de boliches completamente borracho y una serie de cosas que eran cuando a él se le metía el demonio adentro y no medía lo que hacía“, afirmó.
Finalmente, Guarello reveló que ante de su muerte pudieron hacer las paces: “Frecuentábamos unos cafés que están pegados y en un par de ocasiones conversamos. Después di por cerrado el capítulo y decidí nunca más criticarlo públicamente, me parece que él también hizo lo propio”.
“Quedé completamente en paz con una persona que me hizo mucho daño, pero yo también me defendí, bien o mal. Yo siento que mi capítulo personal con Bonvallet, donde fui muy maltratado, no dejó ningún tipo de resentimiento”, finalizó.