El Barcelona goleó por 2-4 al Sevilla en una nueva fecha de la Liga, pero no fue fácil. De hecho, los culés se fueron al descanso en desventaja (1-2) con Arturo Vidal entre los titulares, siendo reemplazado en el camarín.

 

Tras el duelo, la prensa catalana tuvo duros análisis por el desempeño del volante chileno, justo en la previa del derbi ante el Real Madrid  por las semifinales de la Copa Rey a mitad de semana y por la Liga el sábado.

Diario Sport calificó al chileno como “anomalía” con nota 3. “Es complicado descifrar qué papel interpreta en el equipo. Intenso a nivel defensivo, aporta pocas ideas en la creación y le cuesta entender el fútbol con balón, algo imperdonable si juegas en el centro del campo del Barça”, agregaron.

Por su parte, Xavier Ortuño fue aún más duro con el mediocampista nacional, en una columna de opinión publicada por el mismo medio español.

 

“Pensando en que encontraría a un Sevilla peleón y guerrero, que marcara al hombre y fuera un partido de ida y vuelta, Valverde optó por alinear a Arturo Vidal en el once... pero de la teoría a la práctica fue muy poco”, sostuvo.

Complementó: “el partido se convirtió en un duelo de precisiones y de errores y ahí el chileno sufrió muchísimo. Recuperaciones complicadas, pases en la frontal que exigían de pierna de cirujano, balones que era mejor bajarlos que intentar rebotarlos. Ernesto rectificó en el descanso y sentó a Arturo Vidal para dejar entrar en su sitio a Ousmane Dembélé, error corregido y esperemos que lección aprendida”.

Sentenció que “Arturo puede aportar a este Barça pero con las necesidad de juego actual del equipo y con Coutinho en modo off se necesita un centro del campo que logre circular más el balón... ya habrá tiempo para ir a la guerra, pero a veces aunque haya pelea, el juego de Arturo no favorece al equipo”.

Por su parte, Mundo Deportivo defendió al Rey Arturo: “señalado”. “El Barça necesitaba una sacudida y él pagó el pato sin haber sido el peor en la primera parte. Tuvo mucha más actitud que aptitud. Messi aparte, fue el único que remató con intención con un cabezazo”.