Eduardo Morante llegó a Universidad de Chile en 2012 por una cifra récord en el momento, un total de 2 millones de dólares que pagó el equipo a Emelec por el futbolista pero finalmente su rendimiento estuvo opacado por una lesión que no le permitió tener continuidad y disputó apenas un par de compromisos.

Pero más allá de eso, el ecuatoriano confesó que las cosas también se complicaron en su carrera por malas decisiones personales. "No me cuidaba mucho, lo juro. Me gustaba mucho la noche, el alcohol, las mujeres, y eso me apartó mucho del fútbol", afirmó en el programa Leyendas.

Cuatro años después de su paso por el Bulla intentó hacer mejor las cosas luego de un fichaje, pero poco pudo cambiar en el momento. "Traté de sentar cabeza cuando fui a Mushuc Runa. Ahí las piernas no me respondían", manifestó quien llegara a tener algunos partidos con la selección de su país.

También tuvo palabras de lo sucedido en su etapa con la institución azul. "El problema que tuve con la lesión de la U fue en un momento donde me dejé meter presión. Tenía la presión de Jorge (Sampaoli) y la gente. Entonces me desgarro; un desagarrito chiquito. Me dijeron 'en 21 días estás listo'. En 17 días me meten a entrenar y me rompo más", apuntó.

Luego de eso, Morante no pudo ganar espacio con Universidad de Chile y rápidamente tuvo que buscar un nuevo rumbo en su carrera, que a partir de ahí fue exclusivamente en Ecuador. "Cuando me recuperé era como volver a empezar a jugar, y ya Jorge (Sampaoli) tenía su equipo encaminado".