Diego Urrutia ha tenido un año para el recuerdo, primero, su increíble triunfo en el Festival de Viña del Mar 2023, en donde se llevó los aplausos y las Gaviotas, luego recibió el Copihue de Oro en la categoría “Creador de Contenidos del Año” y más recientemente, se convirtió en el primer humorista nacional en superar el millón de seguidores en Instagram.

En conversación con Red Carpet, el joven comediante oriundo de Temuco se refirió al hito que acaba de superar. “Bueno, uno siempre está… O al menos yo estoy como a la búsqueda de seguidores para que la gente vaya a mis shows. Eso es como lo inicial. Jamás pensé que iba a llegar a tantos seguidores, que iba a batir ese récord, digamos”.

Asimismo, añadió que aún está impactado por superar el millón de seguidores en redes sociales. “Fue sorpresivo y como que todavía no lo creo. Y ha sido entretenido, por un lado, un poco mal porque ya no puedo tener contacto directo con la gente que antes podía tener, hasta alcanzaba más o menos a leer los mensajes, ahora ya no puedo leer los mensajes, todos los que me llegan. Entonces, eso igual es un poco triste, pero también es bacán que más gente conozca tu trabajo”.

“Es como muy sorprendente y también es muy bonito. Es un poco lo que busco yo, como tratar de hacer reír a la mayor cantidad de gente posible”, agregó.

El triunfador de Viña 2023 también se refirió a los comentarios negativos, sobre todo con una exposición tan masiva en redes. “Es que siempre he sabido que esto funciona así. Piensa que hasta las personas más amadas le llegan comentarios, de repente ni siquiera como que porque la gente es mala onda, sino que porque alguien quiere molestar”.

Agregando que no da espacio a haters en sus redes. “No le doy mucha importancia, la verdad. Lo elimino nomás de los comentarios, los bloqueos para que no lo vuelvan a hacer, sobre todo algo como más terrible, pero tampoco son tantos comentarios, entonces como que no es algo tan importante, la verdad, para mí”, expresó.

Sus inicios en el humor

El reconocido comediante nacional estudió un año de derecho para luego cambiar a periodismo, carrera la cual terminó. Sin embargo, confiesa que pasó por dudas vocacionales, ya que no se veía ejerciendo. Durante esos años, ingresó a un taller de stand up lo que finalmente lo ayudó a encontrar el camino que quería seguir.

“Gracias a eso dije “igual está bueno, esto podría intentarlo un poco más”. Y de ahí intentando, de a poco, casi sin querer, me metí al mundo del humor. Pero porque no me había dado cuenta de lo mucho que me gustaba el humor. No me había dado cuenta de que me sabía todos los chistes, de que de niño me había visto a todos los humoristas, de que me sabía la historia de un montón de ellos”.

Como que no me había dado cuenta. Hasta que llegó al taller, lo hice y recién ahí me pude dar cuenta de que me podía dedicar al humor. Antes era como algo así, como extraño, como algo muy artístico, muy lejano”.

El 2015 Diego comenzó a realizar standup en su ciudad natal, Temuco, en donde se presentaba esporádicamente. “Igual hacía poco stand up, hacía una vez al mes, si es que era difícil, y bueno, no habían espacios. Creo que todavía no hay espacios como decentes para poder hacer stand up. Y empecé en ese año y después, cuando llegó la pandemia, no tenía nada más que hacer porque estaba en mi casa, me había titulado recién”.

Durante la pandemia provocada por el coronavirus comenzó a subir videos a redes sociales en donde mostraba su humor. “Ahí empecé a hacer videos con el celu nomás, me acuerdo de que tenía un celu como medio charcha en ese tiempo, que no se veía muy bien. Entonces, todos mis primeros videos se veían súper pixelados, como súper mala calidad. Y ahí empecé a hacerlo y a la gente le gustó.”

“Igual lo intenté hacer un tiempo, no me funcionó y después de nuevo probé, y ahí sí me funcionó y a la gente le empezó a gustar y empecé a hacer videos y estuve, no sé, el año pasado habré hecho un video de lunes a jueves durante todo el año, más de cinco videos a la semana, yo creo, durante todo el año”.

Hace casi un año se mudó de Temuco a Santiago para seguir creciendo como artista. “Siempre tenía que hacer cosas acá en Santiago, de publicidad, de los shows, un montón de cosas que antes no podía hacerlo. Y es fome es igual ese centralismo que hay. Me acuerdo que estaba en Temuco y todos los comediantes me llamaban y me decían como ‘Oye, vente acá, a abrir tal show. Y yo decía ‘no puedo, estoy en Temuco’. Como que tienen que avisarme con dos semanas de anticipación para poder viajar y tomar los pasajes. Y era una lata”.

La preparación para sus rutinas

Diego es uno de los comediantes más reconocidos de la escena humorística nacional, en donde no solo cuenta con más de un millón de seguidores en Instagram y TikTok, sino que también sus shows en vivo se agotan con gran rapidez.

Con rutinas que hacen un guiño a sucesos de la vida cotidiana que son altamente identificables, el comediante revela que la preparación para sus shows es un proceso extenso, en donde él prueba y estudia mucho antes de sumar algún chiste a su espectáculo.

“Yo estoy todo el rato estudiando, soy como un mateo del humor, todo el rato analizando a la gente, a la gente que conozco, como que analizó los comportamientos y digo ya esta persona es de esta manera, porque es del sur”.

“Esta persona es así por esto. Como que me voy dando cuenta de ciertos patrones que la gente va cumpliendo. Lo veo en internet también. Por ejemplo, esto es un secreto, sigo a caleta de gente en Instagram que no conozco. Solo por seguir gente normal. Entonces, para ver de qué hablan o qué hacen, no sé, de distintos rubros, gente normal, gente X. Entonces ahí me doy cuenta de que ahora está de moda Barbie, de que está de moda Oppenheimer y todas esas cosas”.

Su exitoso paso por Viña 2023

“Me acuerdo que cuando supe que había hacía como una ligera esperanza, cuando supe que Yerko (Daniel Alcaíno) se bajó y que podían llevar a cualquiera, le pregunté a mi papá ¿qué pasaría si voy a Viña? Como que quería que ellos me dieran un poco la aprobación”.

“Y los dos me dijeron como “sí, dale nomás, no hay problema, ¿quieres ir ahora? Sí, dale”. Quizás no creyeron que en verdad podía ir. Entonces me decían “Sí, dale nomás, dale”. De ahí dije sí, apaño, quiero ir. Y a los dos días o al día siguiente me llamaron. Y ahí nos demoramos un ratito más o menos en confirmar todo, pero el 14 de febrero ya estaba confirmado el día de San Valentín. Ahí me llegó harto amor de la gente, porque no había llegado nada”.

Diego se subió al escenario del Festival de Viña del Mar por primera vez el pasado 21 de febrero, en donde el ofrecimiento llegó a menos de una semana que comience el certamen, luego de que Daniel Alcaíno, el actor detrás de Yerko Puchento, decidió bajarse del espacio.

Seis días antes que comience la nueva edición, la cual retomaba el festival tras dos años de ausencia producto de la pandemia, Diego fue anunciado como el nuevo comediante que subiría a la Quinta Vergara, la misma noche que las cantantes Tini Stoessel y Emilia.

“Casi lo único que podía hacer era ensayar y dormir, nada más, y comer. Eso era lo que hacía toda esa semana, es lo que hice. No vi medios, no vi nada de otra persona, no vi nada. Solamente ensayar y dormir”.

Con una rutina divertida que sacó carcajadas en el público y en los televidentes, Diego se llevó todos los premios que entrega el público (Gaviota de Plata y Gaviota de Oro).

Tras su exitoso paso por Viña, su carrera dio un giro importante. “Pasó como de un nivel a otro en muy poco tiempo. De partida con los seguidores de 300 a 900. Eso hace que uno tenga cierta responsabilidad y esté más obligado a hacer cosas con mayor calidad. Al menos siento yo”.

“Por eso no estamos haciendo shows en bares, como lo hacía el año pasado, sino que estoy haciendo show en teatro, en casinos, como bien grandes, con pantallas, con hartas luces, como tratamos de hacer un show bien producido en ese sentido. Y eso fue como el gran cambio, pasar de los bares donde iba yo solo a pasar a hacer eventos como masivo con todo un equipo detrás, ese yo creo que ha sido como el gran cambio. Todas las cosas ahora las veo como en conjunto con un equipo, antes las veía yo solo”.

“Obviamente también la responsabilidad en los medios igual ha cambiado. Las cosas que uno dice en Instagram, a veces son noticias. Yo eso antes no me pasaba. Entonces tengo que tener cuidado igual las cosas que digo, porque yo en mi historia, sobre todo, soy súper espontáneo y digo un montón de cosas”, añadió.