Nicolás Jarry no vive su mejor momento. El número 57 del mundo y 2 de Chile, acumula dos meses sin ganar un solo partido, con derrotas que minaron su confianza y lo dejaron tambaleando en el ranking.
Si bien el Masters 1000 de Roma acecha con la presión de los 650 puntos que defiende, antes debe pasar por Madrid, donde entró directo al cuadro principal gracias a su posición actual.
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Un viejo fantasma acecha a Jarry
Si Jarry supera su debut contra un rival surgido de la qualy, se le cruzará en el camino un tenista al que los chilenos le conocen bien.
No es cualquiera: Grigor Dimitrov, ese verdugo que en 2023 lo tumbó en Shanghái y, apenas días atrás, volvió a sentenciarlo en Montecarlo 2025.
Además, ese mismo jugador eliminó a Cristian Garin en París 2019 y le cruzó la raqueta a Alejandro Tabilo en Miami 2024, Laver Cup 2024 y, de nuevo, Montecarlo 2025. Un historial que pinta a un hueso duro de roer.
Nicolas Jarry y Grigor Dimitrov se dan la mano tras el Masters de Shanghai 2023 (Getty Images).
El reto de romper la mala racha
Madrid será la primera gran prueba para la segunda raqueta de Chile. Con la moral por el subsuelo, Jarry necesita más que nunca un golpe de autoridad: vencer a su verdugo de siempre sería un respiro tanto en lo anímico como en lo numérico.
Un triunfo ahí le permitiría reencontrar el golpe y, de paso, frenar esa caída libre en el ranking que amenaza con dejarlo fuera de los cuadros principales del circuito.
