En el pasado mes de abril se dio el vamos al Bolsillo Familiar Electrónico, beneficio estatal que aporta mensualmente $13.500 por causante, como forma de ayudar a enfrentar las alzas en el precio de alimentos y que forma parte de un paquete de medidas del Plan de Seguridad Económica del Gobierno de Gabriel Boric.
De todas formas, como todo beneficio estatal tiene ciertos requisitos para poder recibirlo y mantenerlo en el tiempo.
Las razones por las que puedes perder el Bolsillo Familiar Electrónico que se paga mensual
Efectivamente el Bolsillo Familiar Electrónico sí se puede perder, debido a que quienes los reciben deben cumplir ciertos requisitos para mantenerse dentro, es decir NO ser beneficiario del Subsidio Familiar, Asignación Familiar o Maternal, Subsistema Seguridades y Oportunidades (Chile Solidario).
Recordemos que el aporte del Bolsillo Familiar Electrónico se pagará todos los meses hasta el 31 de diciembre del 2023.
¿A quién va dirigido el Bolsillo Familiar Electrónico?
Según informa Chile Atiende en su sitio web, este beneficio se le entregará a todas las personas que cumplan con los siguientes requisitos.
Causantes de la Asignación Familiar y de la Asignación Maternal, del Sistema Único de Prestaciones Familiares.
Causantes del Subsidio Familiar (SUF).
Causantes de las familias usuarias del subsistema Seguridades y Oportunidades y las familias, pertenecientes al subsistema Chile Solidario, tales como:
- Persona con discapacidad, debidamente acreditada conforme con la calificación y certificación establecida en el artículo 13 de la Ley Nº 20.422.
- Estudiante con necesidades educativas especiales de carácter permanente que participe del Programa de Integración Escolar del Ministerio de Educación.
- Estudiante matriculado en establecimiento educacional con modalidad de educación especial, reconocido por el Ministerio de Educación.
- Estudiante de 18 años a 24 años con 11 meses.
- Menores de 18 años de edad.
Vale aclarar que “causante” se refiere a la persona por la cual se paga el beneficio, es decir, a quienes se denomina habitualmente cargas familiares.