En el último tiempo se ha hecho común que diferentes rubros del comercio soliciten el pago de propina, algo que en muchas ocasiones no tendría que ocurrir, ya que hay servicios que debieran tener incluida la atención dentro del precio.
De hecho, el Código del Trabajo establece que solo determinados trabajadores de algunas áreas pueden pedir propina, sin embargo, hay muchos otros que lo estarían haciendo de forma ilegal.
¿Qué comercios pueden cobrar propina por su servicio?
Según establece el artículo 64 del Código del Trabajo, solamente pueden solicitar propina restaurantes, pubs, bares, cafeterías, discotecas, fondas y similares que atiendan público a través de garzones.
El resto de lugares en los que no se atienda público no deberían pedir propina, ni menos exigirla dentro del monto total del cobro.
¿Es obligatorio dar propina a los meseros?
En el caso de los comercios que pueden solicitar propina, “el empleador deberá sugerir, en cada cuenta de consumo, el monto correspondiente a una propina de a lo menos el 10% del mismo, la que deberá pagarse por el cliente, salvo que este manifieste su voluntad en contrario“.
Esto quiere decir que, si bien los comercios pueden exigir propina, finalmente es el cliente el que decide si pagarla o no, ya que podría negarse en caso de no haber quedado conforme con el servicio brindado.
Española se hizo viral por reclamar ante el cobro de propina injustificado
El debate sobre los lugares en los que se puede pagar por propina o no, apareció en la opinión pública nuevamente luego de que una usuaria de TikTok, de nacionalidad española, se hiciera viral al reclamar por esta situación en la Región de Valparaíso.
La mujer alegó que se le hizo el cobro de un 10% del total de la boleta sin que se le preguntara antes. “Estoy por el centro de Reñaca porque tenía unas reuniones y me apeteció un cafecito (…) Entro a un local y pido un café con leche para llevar, porque no había para sentarse. Era como de estos cafés que te preparan ahí, de paso”, comenzó narrando.
Tras ello, al pagar el producto, cuyo valor era de $3.100, entregó un billete de $10 mil. Sin embargo, de vuelto le dieron $6.500 y no los $6.900 que le correspondían. Al hacer el reclamo, le dijeron era por concepto de propina.
La mujer se mostró molesta ante la situación, sobre todo considerando que no fue atendida por un garzón ni se sentó en el local, sino que solo retiró el café. Ante ello, el cobro de la propina en este caso era injustificado, además de que el 10% correspondía a $310 y no $400, y ni siquiera le consultaron si quería pagarla.