Internet se ha dedicado a reavivar el debate sobre la autenticidad del Santo Sudario de Turín, uno de los objetos más venerados y controvertidos de la cristiandad, esto luego de viralizar una investigación italiana realizada en 2022.
Este lienzo de lino, que según la tradición cristiana envolvió el cuerpo de Jesús después de su crucifixión, ha sido objeto de numerosas investigaciones a lo largo de los años, con resultados dispares que han alimentado la polémica sobre su origen.
El Santo Sudario, que muestra la imagen de un hombre con rasgos similares a los que sufrió Jesús durante su crucifixión, ha sido objeto de veneración desde su aparición documentada en la Edad Media.
Según la tradición, el cuerpo de Jesús fue envuelto en esta tela después de su muerte, y el sudario capturó los contornos de su cuerpo y rostro debido a los fluidos corporales que se impregnaron en el tejido. Sin embargo, la autenticidad del sudario ha sido cuestionada por la ciencia moderna.
En 1988, un análisis de radiocarbono realizado por tres laboratorios de renombre determinó que el sudario databa de entre 1260 y 1390 d.C., sugiriendo que se trataba de una falsificación medieval. Este resultado fue ampliamente aceptado en la comunidad científica, aunque siempre ha habido quienes cuestionaron la precisión de estos métodos.
Un nuevo estudio reabre el debate
Recientemente, un equipo del Instituto de Cristalografía del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas de Italia ha realizado un nuevo análisis utilizando técnicas más avanzadas, como la medición del envejecimiento natural de la celulosa del lino a través de rayos X de gran angular.
Este método tiene en cuenta factores como la temperatura y la humedad a lo largo del tiempo, lo que podría ofrecer una estimación más precisa de la antigüedad del sudario.
Según el Dr. Liberato De Caro, líder del equipo de investigación, los resultados sugieren que el sudario podría tener unos 2.000 años de antigüedad, lo que lo situaría en la época de la crucifixión de Jesús.
“El grado de envejecimiento natural de la celulosa indica que el tejido es mucho más antiguo de lo que sugería la datación por radiocarbono de 1988”, afirmó De Caro a Wired. No obstante, también advirtió que el sudario ha estado expuesto a contaminantes externos a lo largo de los siglos, lo que complica la precisión de cualquier análisis.
Un objeto de fe y ciencia
El Santo Sudario de Turín ha sido objeto de fascinación tanto para creyentes como para científicos. Aunque la Iglesia Católica no lo considera una reliquia oficial, reconoce su profundo valor simbólico.
El sudario se exhibe al público solo tres días al año en la Catedral de Turín, Italia, donde se guarda bajo estrictas medidas de seguridad.
Este nuevo estudio, aunque no concluyente, ofrece una nueva perspectiva sobre uno de los objetos más enigmáticos de la historia y reabre la posibilidad de que el sudario sea auténtico. La discusión sobre su origen y autenticidad probablemente continuará.