Luego que la Junta de Gobernadores de la NBA aprobara la reanudación de la liga de baloncesto, la organización del torneo logró un inédito acuerdo con la asociación de jugadores (NBPA), asegurando que no hará pruebas de control de sustancias de uso recreativo, como la marihuana, una vez que se reanude la competencia en Orlando, Florida.

En condiciones normales, durante cada temporada los basquetbolistas profesionales son sometidos a seis test aleatorios de droga, normativa que fue suspendida por acuerdo de ambas partes durante el parón obligatorio derivado de la pandemia.

Una vez que retorne la NBA con los 16 equipos  que estaban en puestos de playoffs y seis más, la liga retomará los controles antidopaje dejando fuera las sustancias de uso "recreativo" como por ejemplo la marihuana, que según sus defensores no representaría ventajas al momento de competir.

Pese a que en Florida, donde llevará a cabo la reanudación de la competencia de básquetbol, la marihuana es ilegal y su uso puede ser sancionado con hasta 365 días en la cárcel, la NBA aseguró que durante el período en que estén jugando allí no se castigará su uso.

 

 

En caso de que las pruebas de drogas detecten sustancias que incrementen el rendimiento deportivo, el jugador en cuestión recibirá todo el peso del programa antidopaje de la liga, recibiendo una sanción de 25 duelos sin poder jugar, lo que en estas circunstancias significaría perder tod el resto de la temporada.