En el mundo de la Fórmula 1 no basta con ser rápido. Hay que ser constante, frío, metódico y, a veces, hasta sacrificado. Y Lando Norris lo entendió bien. El piloto de McLaren no solo quiere competir: quiere ganar. Y para eso, decidió dejar algo importante en el camino.
La temporada 2025 partió con una sonrisa para Lando, gracias a su victoria en Australia. Pero en las carreras siguientes, esa sonrisa se fue borrando mientras veía cómo Oscar Piastri, su compañero de equipo, se robaba el protagonismo con tres triunfos en cuatro fechas.

ver también
Antes de Ayrton Senna: La trágica muerte que dejó al mundo del automovilismo en shock
Una renuncia que pocos se atreven a hacer
En una entrevista reciente, Norris confesó que no ha tomado ni una gota de alcohol en todo el año.
Nada de brindis, nada de cervezas tras la carrera. Y no es una moda pasajera, es una estrategia: estar al 100% física y mentalmente para pelear por el campeonato.
“Compito contra los mejores del mundo: Max, Oscar, Charles y George (…) Si cometo el más mínimo error, tengo que pagarlo inmediatamente”, reconoció.

Lando Norris con el tercer lugar del GP de Bahréin (Getty Images).

ver también
McLaren pisa fuerte en la Fórmula 1: Oscar Piastri se impuso en el GP de Arabia Saudita
Los errores que Lando Norris no quiere repetir
El año pasado, Norris apareció en redes con la nariz vendada tras cortarse con vidrio en una fiesta en Ámsterdam. Fue justo antes de su primera victoria en la F1.
Este año, cerca de esa misma fecha, ni se asomará por allá. Dice que extraña a sus amigos y ese ambiente, pero sabe que esta vez no puede darse licencias.
“La carrera (de Jeddah) fue físicamente exigente y ahora me gustaría tomarme una copa (…) Pero no he bebido nada en todo el año y estoy orgulloso de ello. Tengo que seguir trabajando duro y no puedo salir de fiesta”, comentó.

Lando Norris con una lesión en la nariz en 2024.

ver también
Max Verstappen no aguanta críticas y “arranca” de entrevista tras perder ante Piastri el GP de Arabia Saudita
¿Un McLaren difícil o un Lando más maduro?
Aunque el monoplaza MCL39 ha resultado ser complicado de manejar, algo que su equipo ya reconoció, Norris no baja los brazos. Quiere adaptarse, mejorar y recuperar terreno. Y para eso, está dispuesto a cambiar incluso lo que parecía intocable: su estilo de vida.
La pista dirá si esta drástica decisión rinde frutos. Pero de que está todo sobre la mesa, lo está.