Un emotivo homenaje para el multicampeón de Formula 1 Michael Schumacher se convirtió en el momento más bello del fin de semana en el Gran Premio de Alemania, disputado en el legendario circuito de Hockenheim.

El hijo mayor de Schumi, Mick, se subió a bordo de la Ferrari F2004 que su padre utilizó hace ya 15 años, cuando fue campeón del mundo por séptima vez y ganó 13 carreras de la temporada, para dar la vuelta de reconocimiento.

Los aplausos se dejaron caer sobre el joven piloto, que actualmente integra el equipo Prema en Formula 2 y ya manejó un Ferrari durante las pruebas del circuito de Bahrein en el mes de abril.

"Por supuesto fueron muchas emociones, sería una mentira decir que no fue así", dijo Mick Schumachera antes de mostrar el interés que le demandó conducir una máquina completamente nueva para él. 

"Traté de sentir cómo funcionaba el auto y de tener un panorama de cómo se comportaba. Cada vez es una emoción diferente. Ahora estamos diez años adelante y fue interesante ver cómo cambiaron las cosas, los autos", explicó.