La aventura de Lionel Messi en el PSG llegó a su fin. El argentino, tras dos temporadas, se despidió definitivamente del club en la previa del partido que disputarán ante el Clermont, en el cierre de la Ligue 1.

Un final abrupto para una estadía que pareció en un inicio, una quimera. Y es que parecía imposible que Messi se fuera del Barcelona algún día, pero ocurrió. Y pese a que en este ciclo logró probablemente el logro más grande de su carrera, quedará marcado para la historia que ganó el Mundial ante Francia, jugando para un club francés.

“Estoy muy feliz de haber podido representar al PSG. Disfruté mucho jugando en este equipo y con tan buenos jugadores. Quiero agradecer al club por una experiencia maravillosa en París”, señaló Messi en declaraciones a ESPN, confirmando lo que ya estaba en la mente de todos: no seguiría en Francia.

Ya en la previa, Christophe Galtier, DT del cuadro parisino, señaló que “he tenido el privilegio de dirigir al mejor jugador de la historia del fútbol. Es un gran privilegio. Mañana es su último partido en el Parque de los Príncipes y espero que sea acogido de la mejor forma”.

Y es que ni eso se puede asegurar. Ya que en los últimos partidos en casa, la relación entre la afición del PSG y Messi parecía irremediablemente rota. Las pifias, algo inédito en la carrera del futbolista argentino, al menos jugando en Europa, nunca habían ocurrido viniendo de su propia hinchada.

Sin ser exorbitantes, las cifras del argentino en el PSG no son malas, todo lo contrario. 32 goles y 34 asistencias en 74 partidos. Pero más allá de los números, quedan en la memoria colectiva tres antecedentes: la poca continuidad, el no poder ganar la Champions y ganarle la final del Mundial a su compañero de equipo, Kylian Mbappé.

El futuro de Messi solo lo sabe él. Rumores hay por todos lados. La MLS, Arabia Saudita, el propio Barcelona o incluso en Argentina se ilusionan con un par de años de la Pulga en su mejor nivel jugando la Superliga. Algo que seguramente dilucidará en las próximas semanas. Lo único cierto es que se aleja de París.