Un gran desgaste físico estaba teniendo Ben Brereton en el Blackburn Rovers, luego de la lesión de su compañero Sam Gallagher, donde en las dos últimas fechas había asumido el rol de centrodelantero, algo que lo hizo exigir más de la cuenta.
Algo que también observa su entrenador, Tony Mowbray, quien asegura que con el regreso de Gallagher para el partido de mañana por la Championship, cuando enfrenten a Cardiff City, Ben podrá volver a su puesto por la izquierda y así no tener que esforzarse mucho más durante los partidos.
"Ben lo ha hecho muy bien para nosotros, anotó un gran gol contra Hull, ha tenido grandes oportunidades. Creo que está realmente decepcionado de no haber conseguido al menos otros dos goles en su cuenta, lo que lo habría llevado a seis en ocho partidos. Lo está haciendo bien", destaca Mowbray.
Eso sí, el entrenador de 57 años apunta que ya tuvo una charla con sus colaboradores para cuidar el físico de Ben, ya que está entrenando demasiado duro y podría generar inconvenientes en su salud física, además de perder una de sus principales cartas en ataque para el campeonato.
"Estoy hablando con el staff sobre tratar de protegerlo, en cada sesión que está afuera cuando algunos tienen un día adentro y están recibiendo un masaje o en la piscina. Sin embargo, en cada sesión de entrenamiento, Brereton está trabajando duro y sé que es solo un niño, pero es realmente robusto y está trabajando muy duro para desarrollar su juego", profundiza el entrenador.
Si bien no es algo complejo o que moleste al técnico inglés, destaca que el esfuerzo que está realizando Ben lo hace más fuerte en los personal, aunque a veces hace que se apure en algunas jugadas porque tiene el arco siempre en mente.
"Las señales están ahí, se puede ver que es más fuerte, más seguro, quiere disparar y anotar en lugar de preparar a la gente", finaliza.
