Se jugaba la copa de la Liga entre Chelsea y Manchester City. Luego del empate 0-0 en los 90 minutos reglamentarios, se vino la tanda de penales, donde ocurrió un curioso incidente.

El técnico Maurizio Sarri de Chelsea, ordenó el ingreso de Willy Caballero por el arquero Kepa, sin embargo, el español se negó a abandonar el campo de juego, lo que sacó de quicio a su técnico. "En esa situación hubo un gran malentendido. Creí que tenía un problema y que necesitábamos un cambio. No lo descubrí  hasta que el médico me lo dijo en el banquillo unos minutos después", afirmó el entrenador luego del partido.

Agregando que "pensé que el portero tenía calambres y que no sería capaz de estar en los penales, pero el problema no era de calambres y estaba apto".

Eso sí, el adiestrador confesó que está pendiente una conversación con el guardapalos. "Tengo que hablar con él pero solo para clarificar la situación porque es ahora cuando lo entiendo todo bien", cerró.