En el fútbol argentino destacó el fin de semana el paraguayo Ronaldo Iván Martínez, delantero de Platense. El gol que le convirtió a Racing, en la goleada por 3-0 del Calamar, provocó que todas las cámaras apuntaran a este ariete por su calidad en la cancha y por la historia que tiene con su nombre.
Esto porque sus padres son fanáticos del fútbol. Y cuando nació en abril de 1996, las eliminatorias rumbo al Mundial de Francia estaban en su apogeo. Ahí brillaban dos delanteros sudamericanos, que además compartirían después equipo en Inter de Milán: el brasileño Ronaldo e Iván Zamorano.
Por lo mismo es que Martínez expicó en ESPN que su nombre se lo deben a ambos goleadores, que enamoraron a todo un continente hace 26 años. Y se siente orgulloso de representarlos en su identidad.
"Mi primer nombre es por el Fenómeno y el segundo por Zamorano. Estoy contento con la decisión de mis padres", comentó antes de bailar, para celebrar el triunfo contra la Academia y el tanto que logró convertirle a Gabriel Arias.
Ronaldo Iván debutó el 2015 en Cerro Porteño, club donde hizo las divisiones inferiores, pero luego perdió terreno y no fue considerado en el primer elenco. Así fue como pasó a Deportivo Capiatá de su país, antes de pasar a Central Norte de Salta, The Strongest de Bolivia y Resistencia de Paraguay.
Ahora deslumbra con sus anotaciones en Platense, donde al menos por nombre el olfato goleador lo tiene intacto. La próxima semana tiene la chance de demostar ante River Plate que puede seguir dejando una huella en el fútbol trasandino.
