Barcelona logró la complicada tarea de remontarle la eliminatoria de semifinales de la Copa del Rey a Sevilla con marcador de 3-0 en el encuentro de vuelta, teniendo que volver a hacer la heroica en la competición pues a falta de unos segundos estaba quedando eliminado en la penúltima instancia.

Hasta el añadido de la segunda mitad, al cuadro culé le faltaba una anotación para forzar la prórroga y llegó en la última jugada llegó el gol salvador de Gerard Piqué. Lionel Messi había cobrado el tiro de esquina que antecedió la acción y el tanto llegó luego de un centro de Antoine Griezmann a la cabeza del central.

El argentino se encontraba algo alejado de la pelota pero cuando el cabezazo del defensor terminó en el fondo de la red, el capitán explotó en una airada celebración que parece devolverle una felicidad esquiva recientemente en Barcelona, de donde intentó salir en el último verano europeo.

Messi también mostró su alegría luego del pitazo final por la sufrida victoria que deja con vida a los catalanes en la Copa del Rey, la competición en la que tiene más oportunidades de lograr el título.

Barcelona pudieron darle la vuelta a la eliminatoria gracias a los goles de Ousame Dembélé al minuto 12 y tuvieron que esperar hasta el suspiro final para que Piqué forzara el tiempo extra en el que el 3-0 definitivo llegó gracias a un cabezazo de Martin Braithwaite que selló la remontada.