Luis Suárez intenta recuperar el nivel que tuvo en el Barcelona donde se cansó de hacer goles y fue una pieza clave hasta que llegó Ronald Koeman y tuvo que marcharse del club azulgrana.

Hoy en el Atlético Madrid, el delantero uruguayo se puso en el escenario de convertirle al Barça y pese a lo duro de su salida, no duda en responder que no celebraría un gol.

"No lo celebraría por respeto a mis compañeros y a un club que me ha dado mucho”, le confesó al Diario AS de España.

El oriental avisa que “obviamente que es especial, por enfrentarme a muchos amigos, pero voy a defender la camiseta del Atlético a muerte”.

Consultado por la renuncia del presidente del Barcelona José María Bartomeu, Suárez prefiere tomar palco. “La realidad es que lo que pasa en Barcelona, a mí ya no me preocupa mucho. Prefieron estar al margen de lo que sucede allí”, explicó.

Para el final, el Pistolero confirma que sigue en contacto con Lionel Messi. “Seguimos hablando a menudo, pero hablamos de la vida, de lo que está pasando hoy en día. Tenemos una buena relación y no hablamos sólo de fútbol. Tratamos de apoyarnos entre los dos en temas personales y anímicos”, cerró.