El partido de Gonzalo Higuaín en el Juventus ante Hellas Verona estuvo más que accidentado. Fue el último cambio de Maurizio Sarri, quien le dio ingreso al minuto 72 en lugar de Paulo Dybala.

No más entrar al encuentro le dieron la bienvenida en una jugada a balón parado en el que lo tomaron del brazo y en el salto un par de jugadores rivales le hicieron un "sándwich" en el que resultó bastante golpeado.

El resultado de la acción fue la nariz rota para el argentino, quien rápidamente fue asistido por el cuerpo médico que paró el sangrado en medio de los reclamos del Pipa, quien pedía que se cobrara penalti.

Higuaín, a los pocos minutos, tuvo un nuevo contratiempo y se tendió en el césped aún afectado por el fuerte golpe, teniendo que recibir de nuevo asistencia médica. Sin embargo, se mantuvo en cancha pese a la evidente molestia.