Cristiano Ronaldo está en el ojo del huracán en Italia porromper la restricción de movimiento para ir con su novia a un centro de esquí. El goleador de la Juventus fue a dicho lugar en Courmayeur,municipio de la región Valle de Aosta, para celebrar el cumpleaños de su pareja, Georgina Rodríguez.
Sin embargo, las restricciones por el coronavirus le impedíandejar la ciudad de Turín (Valle de Aosta y Piamonte están en ‘zona naranja’), algo que causó mucho revuelo y podría conllevaruna sanción de entre 400 y 1000 euros al luso.
El entrenador de la Vecchia Signora, Andrea Pirlo, le puso paños fríos a la situación y defendió a su estrella en conferencia de prensa: “Cristiano tenía día libre, y en su vida privada cada uno es libre de hacer lo que cree oportuno. Cuando los jugadores están aquí los controlo yo, cuando salen de la ciudad deportiva son ciudadanos libres y cada uno asume su responsabilidad”.
Todo el descalabro empezó cuandoGeorgina Rodríguez, que cumplió 27 años el miércoles, publicó un vídeo junto al Bicho subida a una moto de nieve en Instagram.Enseguida la borró,pero ya había sido capturada por varios medios italianos. Según ‘La Gazzetta dello Sport’, Cristiano y Georgina pasaron la noche del martes en un hotel de Courmayeur, a 150 kilómetros al noroeste de Turín, y pasearon por la estación de esquí la mañana siguiente, antes de regresar a la ciudad turinesa.
Las normas sanitarias anti-Covid en Italia indican que la pareja no debería haber abandonado la ciudad de Turín.En el caso de Cristiano y Georgina, no solo abandonaron su municipio de residencia,sino también la región, Piamonte, para entrar a la vecina, Val d’Oeste, donde se encuentra Courmayeur.