Una insólita situación ocurrió en Corea del Sur, porque un hincha que asistió a ver el partido de su equipo debió ocupar todo su ingenio para poder ingresar al estadio y cumplir con los protocolos exigidos por las autoridades.
Ante la pandemia del coronavirus, las autoridades de Corea del Sur autorizaron que los partidos de la K-League 1, que corresponde a la Primera División, pudiesen jugar con el 10 por ciento de la capacidad de sus estadios.
Sumado a ello, los hinchas tienen que cumplir las entradas por internet y, una vez que lleguen al encuentro, se les toma la temperatura, deben asistir con mascarilla, respetar las distancias y sentarse en butacas designadas, entre otras cosas.
Sin embargo, en uno de los partidos correspondientes a la jornada 14, un fanático se olvidó de llevar consigo su mascarilla. Por lo mismo, debió ponerse una bolsa de papel en la cabeza para poder ingresar y ver el partido.
La situación causó tanta sorpresa que el hincha fue entrevistado por la televisión local y se robó todas las cámaras en el encuentro y quedó a un lado la derrota de su equipo Busan I Park ante Ulsan Hyundai por 1-2.
