Estambul es un territorio caliente y no en vano se han hecho llamar el infierno turco, algo que se hizo sentir en el partido de vuelta de los octavos de final de la Europa League entre Galatasaray y Barcelona que terminó siendo una victoria 2-1 de los blaugranas que siguen en su dinámica positiva en esta parte de la temporada.

Con el marcador final consumado desde el comienzo de la segunda mitad, los culés se dedicaron a manejar la pelota lo más posible y sobre la recta final también encontraron la forma de gastar tiempo. Faltando cinco minutos para los tres pitazos definitivos el ambiente se puso bastante caliente.

El lateral izquierdo de los blaugranas se demoró unos segundos en hacer un saque desde la banda, lo que ocasionó una tremenda molestia por parte de la hinchada local que le lanzó objetos al español, que al sentir el primero se alejó de la raya sin intenciones de seguir jugando mientras esto sucediera.

Hubo conato de pelea tras todo lo sucedido. (Foto: Captura Espn)

Hubo conato de pelea tras todo lo sucedido. (Foto: Captura Espn)

En un principio lo lograron convencer de reanudar las acciones pero la lluvia de cosas siguió y con más fuerza, a lo que el exfutbolista del Valencia se enojara y reaccionara de la peor manera mandando la esférica a la grada lo cual le fue recriminado con silbidos además de recibir la tarjeta amarilla.

Tras eso, poco pasó en el partido con Barcelona teniendo control casi total e incluso con oportunidad de marcar un tanto más pero selló su pase a los cuartos de final de la Europa League y llegará con el ánimo arriba para enfrentarse este domingo a Real Madrid en el Clásico.