Claudio Bravo se ha transformado en un verdadero pilar para el Real Betis en las últimas dos temporadas. El arquero y capitán de la selección chilena arribó desde el Manchester City para ser parte del proceso de Manuel Pellegrini, siendo vital para el alza que ha mostrado el equipo.
A comienzos de esta campaña, el Ingeniero le metió presión al guardameta chileno y selló el arribo de Rui Silva. El portugués llegaba para pelearle el puesto, pero tras lo mostrado en la UEFA Europa League, donde le costó la eliminación en octavos de final, parece haber perdido terreno.
Claudio Bravo se instaló como titular y no soltó más el arco. De hecho, renovó con el Betis hasta el 2023, sellando no solo su vínculo por un año más, sino que poniéndole una tarea gigante a su compañero, que no ve con malos ojos partir.
En conversación con el podcast Defende os teus sohos, Rui Silva habló de sus planesy dejó claro que quiere jugar. “Tengo el objetivo de jugar el Mundial, de volver a la selección.Sé la exigencia, sé que tenemos porteros con mucha calidad y que la selección solo gana con eso, pero tengo esa ambición”.
Con Portugal ya instalada en Qatar 2022, el arquero quiere sumar minutos antes de noviembre. “Por supuesto que todos los jugadores quieren jugar todos los partidos y el año pasado (con el Granada) jugué 46 o 47 partidos”.
“Pero para eso está un entrenador y él toma las decisiones y eso es algo que siempre tenemos que respetar, mantener la concentración, continuar nuestro trabajo y aprovechar las oportunidades”, agregó.
A tal punto llega la ambición de Rui Silva, que quiere “luchar por los títulos, jugar en la Champions League y participar en los grandes torneos europeos y mundiales”. Tanto, que no descarta salir del Betis y aseguró que espera “seguir creciendo y quizás dar un salto más“.
Su temor en España
Rui Silva también abordó lo que ha sido su carrera en el fútbol. El guardameta aterrizó en España en el 2016 para firmar con el Granada, pero la decisión también tuvo mucho de temor al momento de conocer la exigencia en España.
“En ese momento pensé que estaba preparado, pero cuando llegué a Granada y vi la realidad de la Liga española me di cuenta de que quizás ese no era el momento adecuado todavía para competir al más alto nivel”, lanzó.
Finalmente y pese a lo complejo del inicio, valoró su llegada a España. “Para mí eso resultó ser lo mejor, poder jugar en una liga muy competitiva e ir subiendo poco a poco, porque la realidad de un fútbol y otro es totalmente diferente”.