Este miércoles el Chelsea se clasificó a la final de la Champions League, luego de vencer por 2-0 al Real Madrid en el Stamford Bridge.

Cuando los blues ya ganaban en el campo de juego e intentaban aguantar el resultado, el alemán Kai Havertz sorprendió con una curiosa maniobra para dejar que corriera el tiempo.

El atacante del Chelsea se agachó fingiendo que tomaría el balón tras un pitazo del árbitro, pero finalmente le pegó con la punta del pie y la lanzó lejos.

Sergio Ramos y Toni kroos estaban esperando que le pasaran el balón y claramente se enojaron tras el truco de Havertz.