André Pierre Gignac no sólo hace noticia por su goles. Hace unas semanas le pagó la multa a una hincha que ingresó al campo de juego sólo para abrazarlo, y ahora dio que hablar por una situación mucho más negativa, al ofrecerle golpes al entrenador de Chivas de Guadalajara, Tomás Boy.

El Rebaño Sagrado ganaba tranquilamente 2-0 el encuentro cuando el adiestrador mexicano comenzó a alegar indicando al delantero galo, lo que provocó la expulsión del estratega del campo de juego. 

Por todo el show hecho por Boy, Gignac no soporto más y no sólo lo insultó a distancia, también hizo gestos inequívocos que lo quería golpear.

¿El tema quedó ahí? No. Porque el francés se dirigió una vez terminado el encuentro al camarín de Chivas, pero fue conminado por la policía azteca para retirarse de ahí y enfilar hacia su camarín.