Javier Correa sabía desde que negociaba con Colo Colo de la grandeza del club. Aunque recién la evidenció totalmente con varios meses en Chile. El centrodelantero argentino anotó algunos goles claves para la consagración alba en el Campeonato Nacional 2024.
Como aquel cabezazo agónico ante Universidad Católica en el Monumental. O el empate transitorio frente a Palestino en La Cisterna. Pues bien: al cabo de sus primeros seis meses en Pedrero, Correa hizo un balance en una entrevista extensa.
Fue con Colo Colo TV, donde revivió algunas de esas conquistas, incluida la que inauguró su cuota goleadora en el Cacique. “La idea es que la gente se sienta representada por lo que hago dentro de la cancha. Sabes que las expectativas están altas y que todo el mundo confía en ti”, repasó el Coco Correa, quien llegó desde Estudiantes de La Plata.
“Sí me asustó un poco. Después fui tomando dimensión de lo que era, dónde estaba llegando, cómo se manejaba la gente con su pasión. Es muy noble: das y recibes triplicado el amor en la calle. Te quieren, te saludan”, repasó el cordobés, quien también registra pasos por el Santos Laguna y el Atlas en México.
Y repasó una anécdota que no le había tocado en su vasta carrera como profesional. “Viví una situación: un loco paró el camión en la mitad de la calle y no le importó si venía gente atrás. Se bajó, se sacó una foto y se fue educadamente. Esas locuras las asimilo recién ahora”, apuntó el “9” del Eterno Campeón.
Javier Correa destaca la grandeza de Colo Colo: “No me había tocado que…”
Para Javier Correa, la grandeza de Colo Colo se observa a diario fuera de la cancha. Y ya tiene en su mente algunas escenas imborrables. Que nunca antes había experimentado. Ni en Argentina ni en México. Y dio una prueba de que uno puede recibir sorpresas en cualquier momento de la vida.
“En Argentina sí se vive, pero no me había tocado que nos paren en la autopista o no poder avanzar para ir al aeropuerto”, apuntó el ariete, que también jugó en Racing Club de Avellaneda y Colón de Santa Fe. De hecho, su nombre había sido pedido por Gustavo Quinteros para reforzar la ofensiva alba.
Al final, su arribo se dio con Jorge Almirón en la dirección técnica colocolina. Esa historia en el principal terminal aéreo de Chile fue nuevo para él. “No. Una locura. No llegábamos más”, sentenció el Coco, quien ya suma kilómetros en la puesta a punto para llegar bien físicamente a la pretemporada del primer equipo.