La pandemia del coronavirus ha atacado de manera indistinta al fútbol en todo el continente sudamericano. Sin embargo, en Chile y los otros países ya comienzan a advertirse señales para la vuelta de la actividad.

Un panorama en el que Colo Colo se está quedando atrás. El Cacique mantiene suspendida la relación laboral con los jugadores de su primer equipo y los entrenamientos son personales, sin ninguna indicación del club.

El escenario es completamente distinto frente a los rivales del Cacique en Copa Libertadores. Athletico Paranaense y Peñarol ya retomaron los entrenamientos presenciales en Brasil y Uruguay, mientras Jorge Wilstermann quiere hacerlo a principios de julio.

En el cuadro albo, sin embargo, no hay nada claro. Los albos esperan que se levante la cuarentena en la Región Metropolitana para poner fin a la interrupción del contrato de los futbolistas y volver al estadio Monumental.

En este sentido, Colo Colo da una ventaja con miras a la vuelta de las competencias a nivel continental, que la Conmebol espera articular a partir de septiembre, en el minuto en que se liberen las restricciones de traslado aéreo entre los países del continente.

Caso a caso

Athletico Paranaense, último rival de Colo Colo en la Copa Libertadores -triunfo 1-0 en el Monumental- regresó el 27 de mayo a las prácticas, aunque debido a restricciones de la autoridad sanitaria lo ha hecho de manera irregular.

De acuerdo a la proyección que hacen en Brasil, el fútbol podría retomarse el 18 de julio.

Peñarol retomó los entrenamientos el lunes, "después de que todos los integrantes del plantel superaran de forma positiva el hisopado realizado la semana pasada, descartando casos de covid-19 en jugadores y miembros del cuerpo técnico", informó el club.

El chileno Christian Bravo llegará mañana al país oriental, y tendrá siete días de observación antes de sumarse. Al igual que en Chile, las autoridades proyectan la vuelta del fútbol para el 1 de agosto. 

Por su parte, Jorge Wilstermann de Bolivia -que derrotó a Colo Colo en el debut de la Copa- fue el primer equipo de su país en alistar el protocolo para regresar a los entrenamientos presenciales. Los bolivianos registraron un caso de coronavirus: Moisés Villarroel.

Según se informa en Cochabamba, las prácticas comenzarán en dos semanas más.