En el estadio Monumental no hay dos lecturas sobre la salida de Agustín Orión. Mario Salas dio otro golpe de timón sobre un peso pesado del plantel, aunque esta vez los líderes no se quedarán en silencio.
“Hay otras cosas de las que después se van a enterar”, lanzó a la pasada Esteban Paredes ayer, en la conferencia de despedida de Orión. Y el técnico colocolino se apunta como el principal foco del conflicto.
“Todos los grandes del equipo están con Agustín. La relación de los referentes con Salas es nula… bah, prácticamente no hay relación. Para nosotros, el motivo está claro. No le gustan los jugadores de personalidad fuerte”, aseguraron desde el camarín del estadio Monumental al diario El Mercurio.
En La Cuarta aseguran que Orión podía ser un aporte, incluso desde la condición de tercer arquero. “Orión nos aportaba calidad humana y seguridad en el arco. Además, Brayan(Cortés) podía aprender muchas cosas de él”, subrayaron al diario pop.
Así las cosas, Orión se suma a las salidas de Damián Pérez y Lucas Barrios en el receso veraniego, y a la de Esteban Pavez en el invernal. Un Colo Colo que pierde galones a nivel de jerarquía, pero que no incomoda a Salas.
De hecho, el gerente deportivo de los albos, Marcelo Espina, se apuró en aclarar que no irán en búsqueda de un refuerzo, pese a que cuenta con el dinero (la venta de Pavez) y el cupo de extranjero (por la salida de Orión) para hacerlo.
Así se comienza a revelar parte del trabajo que llevará a fin Salas en el Cacique: la reestructuración de una planilla veterana con sueldos muy altos y en la que los próximos en terminar contrato son nada menos que Esteban Paredes y Jorge Valdivia.
Sin ir más lejos, el Tanque habló ayer junto a Orión, y Valdivia, según El Mercurio, sería el testigo de una reunión entre Salas, Espina y el arquero argentino, que finalmente no se produjo.
