Un mes tardó Joaquín Montecinos en ganarse una camiseta de titular en el fútbol mexicano. El delantero chileno jugó desde el inicio en la sorpresiva victoria de Tijuana sobre Toluca (2-1), participó de la apertura de la cuenta y marcó el gol del triunfo. Figura.

Pero el presente del ariete de 26 años tuvo un vuelco en 2019. Un año tormentoso para San Luis de Quillota en Primera B, con cuatro entrenadores distintos, y en el que Montecinos encontraría la llave para su sorprendente momento actual.

El director técnico argentino José María Martínez decidió adelantar al seleccionado chileno en el campo de juego. Después de actuar como lateral, pasó a la posición de volante y extremo y se abrió un nuevo mundo, del que hoy saca dividendos.

Así lo reconoció el jugador de Xolos: “Antes, hacía un par de goles por año, siempre era más asistidor. De lateral me costaba mucho destacar estas cosas, porque estaba tan atrás… además tuve técnicos muy defensivos que no me dejaban pasar y pasar es mi mayor virtud”.

“Me estanqué por muchos años en un puesto que no era el mío. Podía cumplir, pero no era lo mejor. Y vino un técnico en San Luis de Quillota que me puso de volante por la derecha y empecé a hacer mucho más daño, a hacerme notar mucho más”, recordó hace dos semanas.

Montecinos estaba en la gloria. Se sentía “libre”y con “más soltura con la pelota”, pero el DT Martínez se peleó con los dirigentes del cuadro canario y no siguió. La oportunidad perfecta para Héctor Adomaitis, que proyectó un futuro de elite para Montecinos.

Joaquín Montecinos tuvo un gran cambio táctico durante su paso por San Luis de Quillota, que le abrió las puertas de un futuro de proyección

Joaquín Montecinos tuvo un gran cambio táctico durante su paso por San Luis de Quillota, que le abrió las puertas de un futuro de proyección

El Ruso figuró como uno de los delanteros más recordados de Colo Colo a fines del siglo pasado e iniciaba su carrera como entrenador, aunque siempre con una gran conexión con el fútbol mexicano. De hecho, recomendó inmediatamente a Montecinos al Cruz Azul.

Pero antes quiso tenerlo en Deportes Melipilla. Montecinos asegura que Adomaitis “hizo que yo cambiara rotundamente mi juego, en el sentido de explotar todas las virtudes. Me dijo ‘compadre, eres de ir hacia adelante, te gusta pegarle al arco, seguro harás muchos goles'”.

Joaco no llegó al Cruz Azul, pero hoy comienza un camino lleno de expectativas en Xolos de Tijuana. Y que tiene como condimento especial a la selección chilena, que más que nunca necesita de su aporte.