Gustavo Quinteros debutó en el banco de Colo Colo después de una verdadera odisea: ratificado el sábado, viaje por tierra de Buenos Aires a Santiago para llegar el lunes de madrugada, presentado el martes y a la cancha el viernes ante Coquimbo Unido, el equipo de Juan José Ribera que venía al alza y quería demostrarlo por la fecha 14 del Campeonato Nacional.
Y el primer tiempo fue caliente en el Francisco Sánchez Rumoroso. El Cacique partió bien, presionando y mostrando algunas cosas que no había exhibido. A los 10’, pase flotado de Gabriel Costa para Esteban Paredes, éste remató y contuvo bien Matías Cano.
Pero poco a poco Coquimbo se fue haciendo fuerte y se acercó al arco defendido por Miguel Pinto. A los 38’ hubo reclamos de posible penal a Gabriel Costa que el árbitro, Nicolás Gamboa, desestimó. Marcos Bolados luego intentaba pero en offside, lo mismo que antes Juan Manuel Insaurralde que lo perdía solo, pero también en posición ilícita.
Con el Pirata ya mejor plantado llegó la apertura de la cuenta. Penal vía VAR por mano del Chaco Insaurralde y Joe Abrigo cambió por gol cuando el primer tiempo se iba. Gabriel Suazo terminó con un remate mordido sobre el arco de Cano y Esteban Paredes se llevó amarilla por reclamos. Al descanso.
Emociones múltiples, empate agónico, Matías lesionado
En el segundo tiempo empezaron las emociones rápido, con un gol de tijera anulado a Esteban Paredes por posición de adelanto previa de Marcos Bolados, mientras que Juan Carlos Espinoza se la picaba a Miguel Pinto y la sacó al córner Bryan Soto.
A los 55’, Colo Colo reclamó penal sobre Gabriel Costa pero lo desestimó el juez, Nicolás Gamboa, hasta que cayó el empate albo: cambio de frente de Matías Fernández, que había ingresado por el joven Soto, Marcos Bolados la mandó al segundo palo con zurda y Costa apareció con todo para cabecear en una interesante jugada de fútbol que hace mucho Colo Colo no mostraba.
A los 68’, Esteban Paredes se lo perdió solo tras una triangulación de Brayan Véjar con Gabriel Costa y, cuatro minutos más tarde, se lució Matías Cano ante un bombazo del mismo Véjar.
Los dos equipos buscaban sus opciones y tuvo premio el local a los 83: mala salida de Miguel Pintoa pelear muy lejos de su arco con Mauricio Pinilla, éste reclamó un golpe y la calzó de primera Nicolás Berardo para convertir con arco descubierto.
Para colmo de males de Colo Colo, Matías Fernández se lesionó tras un trancazo y debió salir. Quinteros confió en los jóvenes, envió a Branco Provoste y Luciano Arriagada y tendría un premio que antes no se le daba ni por asomo: última jugada del partido, tiro libre y Arriagada la peinó hacia atrás para rescatar un empate que lo celebraron como una final, porque los llena de aire en lo anímico.
Colo Colo, tras este caliente 2-2, recibirá ahora a Unión Española y Coquimbo, masticando la rabia de tres puntos que tenía amarrados, quiere seguir con su alza futbolística frente a Cobresal en El Salvador el próximo miércoles.
