Honestidad brutal de Esteban Paredes. En entrevista con El Mercurio, el capitán de Colo Colo admitió que un caos absoluto en el camarín está repercutiendo con todo ahora en la cancha. Y todo derivado del período del receso, donde hubo peleas con los dirigentes y entre los mismos jugadores. 

“Lamentablemente estamos en crisis. Hace muchos años que no se veía esto. Después de cinco meses sin jugar fue muy extraño volver, pero hay que ver la realidad y estamos en una crisis potente. Hay que ganar con urgencia. La imagen que dejamos ante O’Higgins fue paupérrima, lo más bajo en muchos años”, confesó el ídolo albo. 

Además, manifestó que ve esto “como algo muy complejo. Nunca esperamos llegar a estas instancias que nos hizo pelearnos con la dirigencia primero y después hubo peleas internas que no había visto en los 10 años que llevo en el club. Nunca habíamos llegado a tener discusiones así entre compañeros. Y claro, no entrenamos, ni siquiera por vía remota, y hoy estamos pagando las consecuencias de todo eso. En los segundos tiempos nos pasan por arriba, esa es la verdad (…) No hemos ganado, tampoco hemos jugado de la forma como Colo Colo debe jugar. Físicamente deberíamos estar mejor que cualquiera, porque tenemos todo en el club, pero lo que ha pasado obviamente nos perjudicó: tres meses sin entrenar es demasiado”. 

También confesó el duro round entre Pablo Mouche y Julio Barroso, derivado del pago a seis futbolistas (el delantero argentino, Matías Zaldivia, Juan Manuel Insaurralde, Nicolás Blandi, Carlos Carmona y el propio Paredes) de dineros “suspendidos” durante el período en el que Blanco y Negro se acogió a la Ley de Protección al Empleo y que correspondían a derechos de imagen y/o cesión o arriendo de pases

“Yo trataba de calmar a ambas partes. Pero tampoco me puedo poner el balde. Soy el capitán, tenía que entender a los dos. Los compañeros tenían razón: íbamos a recibir una plata que era por derechos de imagen, que tampoco tenemos culpa, pero era injusto que los otros compañeros no recibieran nada. Se generó algo raro, extraño, molestias. Y sí: hubo discusiones muy altas”, reconoció el capitán del Cacique. 

“Hubiese sido distinto negociar con Aníbal Mosa” 
 

Consultado por los dardos cruzados con los dirigentes, Paredes contó que “ambas partes nos equivocamos y lo hablamos. Si bien tienen que pagarnos un gran porcentaje de la negociación, hoy volver a lo mismo, pensar en eso, no hace bien. Ni a la dirigencia, ni a nosotros, ni a Colo Colo.

todo el plantel se sintió tranquilo, contento. A nadie le gusta que le saquen plata de su sueldo. Lo tomamos de buena forma. No hemos hablado con los dirigentes para saber cómo lo tomaron. Por ahora nos notificaron de abril y mayo. Además pueden multar a Colo Colo”. 

 

De paso, comentó sobre el pago de junio y julio que “podemos apelar y ver esos dos meses. Es complejo, difícil. No sé cómo lo va a tomar la dirigencia. Nosotros luchamos por nuestros dineros. Estábamos dispuestos a dejar algo de nuestras remuneraciones. Teníamos la opción y la obligación de dejar un porcentaje alto del sueldo. Le pedimos una última reunión a Harold Mayne-Nicholls, pero no la concedió y llegamos a esto. Pero si me piden ayudar al club, lo haría. Y no demandaría”. 

Entonces, ¿con Aníbal Mosa hubiera sido distinto? “Totalmente. Es un tipo muy colocolino, que ama la institución. Hubiese sido de otra forma, menos perjudicial para el club”, sentenció. 

Finalmente, el goleador comentó sobre traer un nuevo entrenador que “es difícil, complicado. Más encima está el tema del dinero, porque el club está sobrepasado. Es difícil traer un técnico por tres o cuatro meses. Mínimo va a pedir un año más y no será barato. Lo primero corresponde a los jugadores: ponernos la camiseta y luchar. Si lo dirigentes quieren traer un técnico, habrá que cambiar”.