Comer y ver fútbol, quizás dos de las cosas más placenteras en la vida. Generalmente, a menos que sea un maní o una exquisita mechada, no se pueden hacer al mismo tiempo, por lo menos cómodamente. Pues bien, habrá un lugar donde sí…
Se trata del Santa Laura, estadio en el que van a implementar una nueva modalidad de ver los partidos, muy al estilo europeo. Ahora podrá usted servirse un buen plato mientras observa los bellos pastos del estadio de Independencia.
Es una fórmula muy europea, pero que ha sido replicada en varios estadios en Latinoamérica, siendo los principales los del vecino país, donde equipos como River Plate y Estudiantes de La Plata lo han replicado.
“Catedral” se llama el nuevo lugar donde los hispanos podrán ir a disfrutar de una buena comida mientras alientan al Rojo. Este lugar, muy al estilo del Viejo Continente, será inaugurado este 26 de mayo.
¿Cómo se logra?
Para poder vivir una experiencia europea, habrá que, primero que todo, pagar. Para ello, os fanáticos pueden adquirir sus entradas en el sistema Punto Ticket, con preferencia para los abonados del elenco hispano: Mesa Balcón (ya agotada), con una tremenda vista a la cancha, y Mesa Interior. Ambas tienen un valor de reserva de $10.000.
¿Qué se podrá comer? Estamos en Chile, por lo que la gastronomía empezará con platos típicos de acá, aunque se espera que esto vaya cambiando conforme avance el tiempo.
“Hemos ido haciendo un proceso de transformación y de mejoramiento de la oferta gastronómica, de la mano de Seper una empresa del grupo, desde el año pasado, con el cambio del servicio en todos los sectores. Ahora vamos a apuntar a los clientes habituales. Hay una transformación en el casino del segundo piso. La idea es que sea permanente”, señaló a La Tercera el gerente general del club hispano, Cristián Rodríguez.
Si bien la fecha de apertura es este fin de semana, se espera la prueba de fuego para el 1 de junio, día en que se dará, primero, la final de la Champions y, después, los fanáticos podrán disfrutar del encuentro entre la Unión e Iquique. Aunque, ojo, el tiempo máximo de permanencia es de una hora y media.