Con un arsenal de goles, figura como uno de los artilleros históricos de todos los tiempos. Siendo el cuarto en ese ítem, su carrera en Cobresal lo pone al nivel de leyenda minera, compartiendo con figuras como Iván Zamorano y Rubén Martínez.
Se trata de Sergio Salgado, el eterno bombardero minero que dejó su vida en el desierto para vivir en Santiago, y ahora en Curicó. Desde ahí, dialoga con RedGol y repasa sus hitos más importantes.
“Se vino mi hija, luego la otra y con mi esposa decidimos venir a Curicó para poder hacer familia. Yo le hablaba a los jóvenes cadetes de Cobresal en Puente Alto y les decía ‘¿Usted sabe dónde está?’ Pusieron un camarín a mi nombre”, parte diciendo con orgullo.
Sus años dorados en Cobresal y Colo Colo
Sergio Salgado es leyenda viva en Cobresal, donde recientemente lo homenajearon en El Salvador. También integró el plantel campeón de Copa Libertadores 1991 en Colo Colo, aunque se fue a préstamo antes del título.
“Fui al plantel a saludar a Gustavo Huerta. Estuve como 10 minutos hablándole un poco al plantel de honor de la trayectoria del club, que los ídolos, que no son muchos, pues se respetan y y si quieren seguir aquí, tienen que trabajar seriamente en cancha y demostrarlo el fin de semana”, dijo a RedGol.
Fue ahí que el artillero recordó su paso por el mineral y la sociedad con Rubén Martínez e Iván Zamorano. Sobre este último, dijo que “lo conozco desde cuando empezó, cuando llegó con un bolsito a El Salvador”.

“Manuel Rodríguez me dijo, ‘Mira, llega un flaquito que le dicen el helicóptero porque se eleva muy bien hacia arriba y todo, fue goleador en Segunda en Trasandino'”, reveló.
Fue ahí que se la jugó y eligió a su dupla de ataque en Colo Colo por sobre los de Cobresal, diciendo “Barticiotto, porque lo conozco muy bien, jugamos juntos. Para mí lo estuviera siempre de compañero”.

“Fui parte de la Copa Libertadores, jugué la primera fase. Pasar por un plantel donde se ganó una Copa Libertadores, no todos la tienen”, cerró.