Aunque el partido se mantuvo igualado por largos minutos, en definitiva el torneo largo se impuso como modelo para la disputa del próximo Campeonato Nacional de Primera División en el fútbol chileno, pese al favoritismo con el que contaba la opción de realizar dos torneos cortos en la temporada venidera.

La moción de la comisión que integraron O'Higgins, Unión La Calera, Colo Colo, Curicó Unido, Universidad de Chile, Audax Italiano, Universidad Católica, Palestino, Everton y Ñublense era mayoritaria para la realización de dos certémenes de quince fechas, al estilo que se utilizó entre 2002 y 2017.

Así lo hizo ver el representante de Unión La Calera, Marcelo Rosas, en medio del álgido debate. Sin embargo, el presidente de la ANFP, Pablo Milad, y los emisarios de Colo Colo y Universidad de Chile, aclararon que esa no era la única opción que había visado la comisión y que también existía apoyo por el torneo largo.

De hecho, el timonel del fútbol chileno hizo ver que "el campeonato corto no es una buena noticia para el fútbol chileno ni para la selección nacional. Sigamos con los torneos largos que es donde se permite que los entrenadores apuesten por los jugadores jóvenes, ya que en los cortos los técnicos van a alinear más a jugadores con experiencia".

A partir de ese momento se realizó la primera votación, que terminó igualada a siete votos por cada opción, descontando a Magallanes y Deportes Copiapó, quienes pese a que están ascendidos a la serie de honor, no participaron de esta parte del Consejo.

Se mantienen los cinco extranjeros
 

Después del empate en el formato del próximo torneo, la asamblea analizó la moción de aumentar el número de extranjeros habilitados para competir de manera simultánea en cada equipo. En este sentido, la comisión propuso agregar un cupo más a los cinco vigentes, que se podían convertir en siete si el jugador llevaba tres o más años en la competencia nacional.

Sin embargo, el argumento del bien para la selección chilena y la promoción de valores locales volvió a imponerse en la votación, que con un guarismo de 22 a 8 (y una abstención) favoreció la opción de mantener el cupo actual para jugadores foráneos en la competencia oficial del próximo año.

Fue el momento en que se retomó la definición del modelo de torneo, pero esta vez con un saldo a favor para la ANFP, Universidad de Chile y Colo Colo, que defendían la mantención del formato actual de un torneo y treinta fechas. La votación esta vez fue de 10 a 4 en favor del campeonato en versión extensa, que quedó estipulado en las bases definitorias.

El último debate correspondía a la exigencia de minutos para los jugadores jóvenes, con la propuesta de que se disminuya de un 70 a un 50 por ciento del tiempo total de juego.