La frase que el fútbol se gana con goles y no con merecimientos es más vieja que el hilo negro. Pero es algo que ocurrió en el Calvo y Bascuñán, donde un aguerrido Antofagasta pecó de ingenuidad e inexperiencia ante un rival que demostró jerarquía y convirtió cuando tuvo la oportunidad.
Luego de un inicio donde siempre el balón lo tuvo el cuadro local, fue el cuadro visitante el que abrió la cuenta. Everaldo dominó un balón en la entrada del área y remató cruzado rasante al segundo palo de Fernando Hurtado, pese a que el arquero se estiró, no pudo hacer nada ante la buena definición del brasileño.
Antofagasta con mucha gallardía se fue en demanda del arco rival, con muchas más ganas que fútbol, pero le resultó y luego de un doble cabezazo en el área a los 26´ Jason Flores convirtió en plena área chica.
El segundo tiempo mostró a un Fluminense instalado en campo propio y tratando de salir de contragolpe. A los 61´ el árbitro Wilmar Roldan fue muy estricto y cobró penal en favor del Flu. Luciano lo ejecutó y estuvo brillante Hurtado para atajar el disparo desde los 12 pasos.
Luego de la atajada del arquero puma, el CDA se envalentonó y fue por la victoria, con un Felipe Flores movedizo, pero sin gol.
Se durmió el local y lo aprovechó Luciano, el mismo que había perdido el penal para conectar un centro desde la izquierda y poner en ventaja a Fluminense.
El entrenador de CDA, Gerardo Ameli, mandó a la cancha a Eduard Bello por Flores, sin embargo, el venezolano aún no encuentra su mejor versión y no fue gravitante.
Al final lo tuvo Fluminense y Hurtado estuvo notable para ahogar el tercer gol del Flu, que al final fue un justo ganador.
