La selección de Paraguay tuvo a Miguel Almirón desde el comienzo del partido ante la Roja. Cómo no, el ex jugador del Newcastle United de Inglaterra es una de las figuras que tiene el equipo. Y tuvo una acción que en suelo paraguayo han valorado muy bien durante las últimas horas.
Según ellos, Almirón tuvo la llave para el tanto de Omar Alderete que desniveló el partido a favor del equipo que adiestra Gustavo Alfaro. Una conquista después de una pelota parada que dejó prácticamente pulverizadas las chances de ir al Mundial para la selección chilena.
Aunque hay un sorpresivo e inentendible optimismo que reina en el vestuario del Equipo de Todos. Pues bien, todo ocurrió luego de una infracción difícil de explicar que Rodrigo Echeverría le cometió a Ramón Sosa. Corrían 60 minutos cuando el mediocampista del León le dio una pelota detenida al rival.
El zurdo del Nottingham Forest estaba rodeado por tres chilenos, pero aun así Echeverría lo tomó por la espalda y lo bajó. Todo llegó gracias a la pegada de Julio César Enciso. Pero antes, el jugador del Brighton & Hove Albion que está cedido en el Ipswich Town conversó con Almirón.
Recibió la indicación perfectamente. Un gesto del “10” paraguayo que sirvió para alertar al destinatario del tiro libre de Enciso. Luego de darle la instrucción al lanzador, Almirón miró hacia el área chilena y siguió con su rol de director de orquesta. Puso una mano detrás de cada oreja, algo que fue captado en imágenes.
El código incógnito de Miguel Almirón para el gol de Paraguay ante la Roja
Los jugadores de Paraguay sabían lo que iba a pasar después de la seña de Miguel Almirón que seguramente nadie en la Roja pudo interpretar correctamente. Ese par de orejas apuntaba a Juan Cáceres, quien estaba fuera del área. Cerca del árbitro brasileño Raphael Claus.
Apenas Enciso corrió hacia la pelota, Cáceres hizo lo propio en dirección al área de la selección chilena. El defensor de Lanús estaba solo hasta que Felipe Loyola intentó marcarlo. Pero no pudo superarlo en el juego áereo. La pelota fue en dirección al punto penal.
La desvió también Antonio Sanabria. Y luego le quedó a Omar Alderete, que estaba solo en el segundo poste y venció a Brayan Cortés con un tiro algo mordido, pero a quemarropa. Un expediente en el que Paraguay superó claramente a Chile: la pelota parada. Y que sirvió para el 1-0 que dejó a la Roja colgando en una peligrosa cornisa.