El fútbol chileno está en riesgo de vivir un paro de futbolistas, luego de que el Consejo de Presidentes ratificara en la ANFP, el aumento del cupo de extranjeros en Primera División, a seis por equipo e igual número en cancha, y el posterior llamado del Sindicato de Futbolistas Profesionales (SIFUP) a una Asamblea Extraordinaria.
En su comunicado, el ente gremial aseguró que los responsables de esta situación “quieren reventar el actual sistema del fútbol chileno, aprobando medidas que sólo benefician su modelo de negocios”, y añade que “son los mismos dueños de instituciones que tienen multipropiedad, vinculados a agentes de jugadores, que propusieron eliminar los descensos“.
Según la información que dio La Tercera, a diferencia de lo que ocurrió en diciembre del 2023, sólo seis equipos ratificaron su postura para aumentar el cupo de extranjeros: Audax Italiano, Unión La Calera y Everton, además de las abstenciones de Huachipato, Universidad de Chile y Ñublense.
Si bien se entiende que bajo la actual Ley de Sociedades Anónimas Deportivas, los socios no tienen injerencia en la toma de decisiones, hay que apuntar a las personas y empresas que están detrás de esta medida, que a juicio del Sifup, “sólo piensan en sus intereses particulares“.
¿Quiénes están detrás del aumento de extranjeros?
Partamos por quiénes se les conoce directamente como dueños de los equipos, es el caso de Sergio Alejandro Gioino, actual propietario y presidente de Ñublense, quien aseguró en julio que ya no trabaja como representante en la agencia 433.
Después, aparece el nombre de Victoriano Cerda, uno de los que maneja Huachipato, junto a Marcelo Pesce y Marcelo Ambrosio, quienes tras ganar el título en 2023, anunciaron que pondrán a la venta la institución, que según La Tercera, podría tener un valor de US$6 millones de dólares.
Luego, está el Grupo Pachuca, que tiene a su cargo el manejo de Everton, además de sus principales equipos en México, como Pachuca y León, donde tras la salida de Pedro Cedillo, quedaron a cargo Cristián Castro como presidente corporativo y Miguel Torrecilla de presidente ejecutivo.
En el caso de Universidad de Chile, en 2021 el Grupo Sartor adquirió el 63 por ciento de la propiedad del club, que designó como presidente a Michael Clark, que a través de su empresa Redwood Capital, adquirió la Isapre Más Vida, que controló Victoriano Cerda, según reporta Ciper Chile.
¿Existe multipropiedad en el fútbol chileno?
Más tarde, nos encontramos con Christian Bragarnik, el influyente agente argentino que en 2015 llegó a La Calera para hacerse cargo del equipo, y si bien dejó la presidencia del club en 2018, su influencia sigue con Gustavo Papagna, el actual máximo directivo y mano derecha del representante.
Finalmente está Audax Italiano, que en 2022 lo adquirieron “empresarios argentinos y mexicanos”, que pagaron US$7 millones de dólares a la Familia Antillo. Si bien quien da la cara es Gonzalo Cilley, que negó la influencia del trasandino, muchos de quienes trabajaron con él, hoy aparecen en el club de La Florida.
¿Habrá finalmente paro de futbolistas en Chile?
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