Jhovan Kesternich se llama el joven hincha de la Roja que viajó hasta Blackburn para ver un partido del Rovers, con Ben Brereton como gran figura. Claro que paramala fortuna de este fanático, el delantero de la Selección Chilena se lesionó días antes del duelo que iba a ver con Millwall.
De todas maneras llegó al estadio pues tenía las entradas compradas. Y si ya era el rey de la mala suerte debido a que no jugaría Brereton, ese día el partido no se jugó debido a una fuerte nevazón, por lo que se suspendió.
Si algo bueno tuvo el periplo fue que igual pudo conocer a Ben. De hecho se tomó una foto con el ariete donde salía con muletas, dando los primeros indicios de que era fuerte su lesión del tobillo izquierdo.”Fue muy triste ver a Ben con sus muletas, pero estaba bien de ánimo”, contó el fanático de la Roja.
Al juntarse con el jugador, le pidió que le autografiara unas camisetas, como recuerdo del viaje. Un recuerdo que para todo hincha era súper significativo, aunque tal como diría Carlos Pinto jamás imaginaría el desenlace de esos tesoros.
Esto porque en su vuelta a Chile echó las camisetas en la maleta, la que nunca apareció cuando llegó a Santiago. Hizo el reclamo y luego de tres semanas apareció, lo que parecía ser un alivio porque tendría las camisetas.
El problema es que al abrir la valija, se dio cuenta que le habían robado las poleras firmadas por Brereton. “Como si se tratara de una broma cruel”, contó Jhovan en sus redes sociales. “Siempre se puede tener más mala suerte”, cerró.
El reclamo a la aerolínea lo realizará, aunque nada le devolverá unas camisetas que tenían un gran valor sentimental por todo lo que significó haber logrado que el goleador se las autografiara en el estadio del Rovers.