La derrota de Universidad de Chile ante Coquimbo Unido no fue la única desilusión azul en el comienzo del Torneo de Verano. Es que el ciclo de Mauricio Pellegrino todavía no cuenta con la venia de los fanáticos universitarios y el reencuentro con la hinchada fue a medias tintas, con amplios sectores vacíos en el estadio Francisco Sánchez Rumoroso.

Según el balance que dejó la jornada del miércoles en el puerto pirata para los organizadores, solamente se registraron unos 4.200 espectadores en los sectores asignados a la U, para totalizar ocho mil personas, muy por debajo del aforo de 13 mil asistentes que dispusieron las autoridades regionales. 

La menor presencia de público quedó en evidencia al final del segundo tiempo, cuando algunos asistentes comenzaron a buscar las puertas de salida, al desenlace del pálido estreno de los azules con su nuevo entrenador, que incluyó la presentación de refuerzos como Matías Zaldivia, Federico Mateos, Juan Pablo Gómez y Leandro Fernández.

A partir de 2020, el cuadro azul ha tenido problemas recurrentes para contar con su público en las tribunas, debido a las restricciones por la pandemia, los castigos por el mal comportamiento de sus hinchas, la indisposición del Estadio Nacional y la negativa de distintas autoridades para la utilización de otros recintos.

Por esto, se esperaba que el Torneo de Verano fuera la oportunidad para el reencuentro de los fanáticos con su equipo, al margen de que los resultados tampoco han acompañado al elenco azul, que ganó por última vez el 9 de octubre, cuano derrotó por 2-1 a Deportes La Serena en la capital regional.

De todas formas, Universidad de Chile espera tener más compañía el próximo sábado, cuando reciba en la misma cancha a Rosario Central de Argentina, en duelo programado para las 20:00 horas y válido por la segunda jornada del Torneo de Verano.