El Clásico Universitario de este 30 de abril de 2023 carecía de emociones, aunque ya tenía a Ignacio Saavedra amonestado por agarrar de la camiseta a Lucas Assadi. Y en los 32', el partido entre Universidad de Chile y Universidad Católica se interrumpió a raíz de varios proyectiles que estallaron cerca del campo de juego del estadio Ester Roa Rebolledo.
Por cierto, cundió la molestia en los jugadores del Romántico Viajero cuando iban rumbo al camarín local del reducto enclavado en Concepción. Nery Domínguez pasó hacia el vestuario acompañado de Luis Casanova con poca intención de detenerse a dialogar con los medios de comunicación que ya estaban en los pasillos.
"Dejen pasar, por favor", decían un par de guardias que custodiaron la caminata de los azules al vestuario. Leandro Fernández y poco después pasó Xavier Tamarit, ayudante técnico de Mauricio Pellegrino en el cuerpo técnico del Bulla.
"¡Hey! Sacá a la gente de acá", se escuchó a uno de los argentinos de la U gritar antes de emprender rumbo por el túnel. Tras eso, unos 10 segundos después, apareció el Flaco Pellegrino, algo conmovido por la situación, también sin espacio para las palabras.
Con el correr de los minutos, las reuniones se intensificaron en el reducto penquista. La jefa de Estadio Seguro, Pamela Venegas, participó de un encuentro con el Gerente de Ligas Profesionales de la ANFP, Yamal Rajab. Todo eso, a pocos metros de las máximas autoridades de Azul Azul y Cruzados, Michael Clark y Juan Tagle, respectivamente.
