Mark Grayson (Steven Yeun) es un joven de 17 años común y corriente, tal como el resto de sus compañeros en la escuela, a excepción de que su padre es el superhéroe más poderoso de la Tierra, Omni-Man (J.K. Simmons). Pero cuando Mark comienza a manifestar sus propios poderes, para convertirse en "Invincible", se dará cuenta de que las cosas no son como aparentan y que el legado de su padre no es precisamente tan heroico como se pensaba.

Amazon Prime Video sigue apostando por historias de superhéroes distintas a las que estamos acostumbrados. Aquí todo parte como un drama familiar -algo que en todo caso nunca deja de lado-, pero repentinamente cambia hacia una aventura llena de acción sangrienta y sin vergüenza a ser brutal, destruyendo los cimientos del cálido y bonachón perfil heroico que se sostiene en el inconsciente colectivo.

El final del capítulo 1 es una declaración de principios firmada con tripas y mentes completamente confundidas. Es el aviso de que por muy colorido que se vea el horizonte, las entrañas de esta historia ocultan una enfermedad oscura que está haciendo metástasis y no va a parar.

Esta serie animada está en el extremo directamente opuesto y lejano a la timidez. No tiene temor a herir sensibilidades o susceptibilidades y, literalmente, hacer explotar todo, ya sea en lo físico con un nivel de destrucción masivo, así como también en lo psicológico, diseccionando a sus personajes con despiadada exquisitez.

 

Por lo mismo, no se queda corta en espectáculo, pero tampoco en emociones. Pone sentimientos y cuestionamientos racionales sobre la mesa, al mismo tiempo que la pirotecnia barre con ellos para volver a moldearlos y seguir explorando las intenciones la mayoría de las veces no tan puras que tienen los protagonistas. 

Y realmente no se detiene, porque hasta sobrepasa la barrera de los 20 a 23 minutos usualmente dedicados por capítulo a las series animadas. Aquí nos entregan un relato grande y para eso tienen episodios de entre 42 y 60 minutos, sin flaquear y convencidos de que lo que se traen entre manos son toneladas de secuencias, diálogos y mensajes contundentes.

"Invincible": La nueva serie animada de Amazon Prime Video tiene las voces de Steven Yeun, Sandra Oh y J.K. Simmons.

"Invincible": La nueva serie animada de Amazon Prime Video tiene las voces de Steven Yeun, Sandra Oh y J.K. Simmons.

La adaptación del cómic original de Robert Kirkman ("The Walking Dead") y Ryan Ottley explora la responsabilidad de tener superpoderes en el espectro más amplio de lo que implica la amenaza de tener una fuerza mayor, a la vez que se introduce en una moral depravada por la propia relación que tienen los protagonistas con los humanos.

No es una exposición en blancos y negros, el bien contra el mal, sino que a cada paso que la historia da el espectador se sumerge en las áreas más grises de actitudes sospechosas y acciones comprometedoras.

No es gratuito que Evan Goldberg y Seth Rogen estén en la producción después de lanzar con éxito "The Boys". Se ganaron la confianza de Amazon y desde el servicio les dieron la venia para romper una vez más los lustrosos cánones heroicos, porque al igual que con la serie encabezada por Karl Urban siguen escarbando en el lado más oscuro de las entidades todopoderosas y las consecuencias para la humanidad de sus acciones cuando operan a sus anchas. Prácticamente un reflejo de esa idea sobre que el poder corrompe hasta al más humilde de los predicadores; y de eso sabemos muy bien en nuestra realidad.

La recomendación es verla en el idioma original con subtítulos, para no perderse el elenco de voces que va del últimamente alabado Steven Yeun, pasando por Sandra Oh y J.K. Simmons, hasta Walton Goggins, Zachary Quinto, Clay Brown, Mark Hamill y el mismo Rogen.

"Invincible": Una invasión alienígena es sólo una de las amenazas que deberá enfrentar Mark Grayson con sus nuevas responsabilidades.

"Invincible": Una invasión alienígena es sólo una de las amenazas que deberá enfrentar Mark Grayson con sus nuevas responsabilidades.

"Invincible" tiene el espíritu de "The Boys" en esteroides, con la libertad descabellada que permite una animación que no pone límites a su espectacularidad, ni se queda corta en su potencial dramático. Al poco andar se hace adictiva y una vez finalizada te deja pidiendo más, toda vez que ya enganchaste con los personajes y quieres saber a toda costa cuál es la próxima locura que deberán enfrentar. Son ocho capítulos de alto impacto que rinden en cada uno de sus aspectos: narrativa, misterio, atractivo visual, gore y pasión. Un combinado definitivamente explosivo.