Gran polémica generó la elección de Aldo Sanhueza el pasado 7 de mayo como consejero constitucional, no por pertenecer en ese entonces al Partido Republicano, sino por una denuncia de abuso sexual que había en su contra.

Tras semanas de guardar silencio, el ex republicano anunció hace solo unas horas su renuncia como miembro del Consejo Constitucional. Cabe recordar que Sanhueza fue electo con la segunda mayor votación por la región del Biobío.

“Las acusaciones son infundadas”

Luego de semanas de pensar en la decisión y después de incluso renunciar al Partido Republicano de José Antonio Kast, Aldo Sanhueza renunció a su labor como consejero constitucional. La noticia la anunció a través de un comunicado que publicó en sus redes sociales, en el que aseguró que esto es “un paso indispensable para que el proceso constitucional siga el curso esperado con la posibilidad de lograr un gran acuerdo”.

El ahora exconsejero agradeció la confianza de las más de 100 mil personas que lo eligieron, pero destacó que no quiere que sectores radicales lo utilicen.

“Lamentablemente, producto de su derrota electoral, la izquierda radical ha decidió utilizarme como una excusa para deslegitimar el proceso, y no se detendrá hasta obstaculizar su desarrollo, buscando fuñarme y cancelándome desde el primer día de sesiones”, remarcó.

En cuanto a la acusación de abuso sexual en su contra, Sanhueza recordó que no tiene ninguna inhabilidad legal ni judicial que le impidan haber sido elegido y asumir el cargo. “Las acusaciones son infundadas, por lo que solo buscan dañarme como persona y utilizarme para entorpecer el proceso”, aseguró.

Los hechos se remontan a 2019

Si bien Sanhueza deslegitimiza las acusaciones de abuso sexual, se comprobó que el hecho ocurrió el 29 de marzo del 2019, cuando fue capturado por Carabineros en la comuna de Penco en la región del Biobío, luego de haber sido acusado de tocar a una mujer en sus partes íntimas, en medio de un recorrido de bus de la empresa Pullman Tur.

La denuncia se realizó el mismo día y solo horas después se llevó a cabo una audiencia de formalización ante el Juzgado de Garantía de Concepción. Solo en cinco minutos la fiscal Jocelyn Briceño le imputó el delito consumado de “graves ofensas al pudor”.

Briceño ofreció a Sanhueza la suspensión condicional del procedimiento, una medida que contempla el sistema de justicia penal y que permite suspender el proceso judicial en determinados casos, para evitar la aplicación de una pena o sanción al imputado, siempre que cumpla con ciertas condiciones establecidas por la ley.

En este caso en particular, Sanhueza aceptó la medida, por lo que fue absuelto, con la condicional de no acercarse a la víctima por un periodo de un año.