El domingo 2 de octubre, Brasil vivirá la elección presidencial con miras al líder del período que comienza el 1 de enero de 2023 y concluye el 31 de diciembre de 2027.
Los grandes favoritos son el expresidente de Brasil y candidato del Partido de los Trabajadores (PT), Luiz Inácio Lula da Silva, y el mandatario y representante del Partido Liberal (PL), Jair Bolsonaro
Según la última entrega de la consultora Ipec, Lula da Silva recibiría una 47% del apoyo ciudadano contra un 31% de Bolsonario, lo que indica una mayor distancia en relación al anterior informe que indicaba que la brecha entre ambos candidatos era de 15 puntos.
Una de las grandes incógnitas en el proceso eleccionario es si Lula da Silva alcanzará el 50% de las preferencias de los electores en la primera vuelta para ser proclamado como el sucesor de Bolsonario. Si no lo logra, habrá un balotaje, el que fue fijado para el domingo 30 de octubre.
De todas maneras, si sucediera aquello, el triunfo del candidato de izquierda se da casi por descontado pues Ipec anunció que 54% de los brasileños le daría su respaldo a Lula contra un 35% que votarían por Bolsonaro.
Para la primera vuelta, los otros candidatos con más apoyo son el exministro Ciro Gomes (Partido Democrático Laborista), con un 7%, y la senadora Simone Tebet (Movimiento Democrático Brasileño), con un 5%. En total hay once postulantes a la presidencia.
El 2 de octubre, los brasieleños elegirán, además del mandatario, al vicepresidente, parlamentarios del Congreso Nacional, gobernadores y vicegobernadores estatales, Asambleas Legislativas Estatales y Cámara Legislativa del Distrito Federal.