A finales de los 70, durante los 80 y parte de los 90, en nuestro país hubo un juego que era la delicia de los niños, los grandes y que sigue teniendo vigencia hasta hoy: el pinball o flipper. Era común verlos en los distintos recintos de juegos, Diana o incluso en la playa. 

Pero la creación de un freerunner de Letonia llegó aún más lejos. Pavel “Pasha” Petkuns, múltiple ganador de Red Bull Art of Motion, pensó que el único límite para la creatividad es el cielo, por lo que su proyecto tenía que ser a la altura: crear un flipper humano. 

Se trata de Human Pinball, que fusiona una máquina de pinball a escala real para mostrar todo su talento al interior, al convertirse en la pelota humana que recorre este nostálgico juego. 

Fueron tres semanas de rodaje, y siete de montaje, donde Petkuns dio vida a esta máquina compuesta por un muro de 16 metros de altura, 23 de longitud e inclinada en 45º para generar ángulos y saltos casi imposibles alrededor de una serie de monumentos como la Torre Eiffel o la Estatua de la Libertad. 

 

"Crear esta película ha sido un gran sueño personal para mí y es muy emocionante que por fin se estrene para que el mundo la vea. Es genial dar vida a una idea creativa desde mi imaginación, y Human Pinball es el epítome de eso para mí. Espero que todo el mundo disfrute de la película y me gustaría dar las gracias a todo el equipo por su apoyo durante todo el proceso", dijo el creador.