La salida de Reinaldo Rueda de la selección de Chile luce como algo cantado desde hace varias semanas, pero la gran cantidad de incovenientes que han surgido no permiten que se dé ninguna confirmación oficial de la llegada del entrenador al banquillo de Colombia como sustituto de Carlos Queiroz.

Según reportó el diario La Tercera, el técnico cafetero dio respuesta en el último plazo puesto desde la ANFP: fin de año. En las últimas horas de 2020 recibieron el llamado esperado en el que confirmaba su salida por la cifra de 500 mil dólares, algo muy lejano a su claúsula de 2,23 millones de la moneda norteamericana.

Desde Quilín están confiados que recibirán esa cantidad por parte de la Federación Colombiana de Fútbol, que también pone una piedra de traba en la negociación pues no tienen entre sus planes desembolsar esa cantidad de dinero. Sin embargo, este no es el principal problema para la salida de Rueda.

El finiquito del estratega es el mayor punto de discusión, según explicó el medio de comunicación. La ANFP tiene claro que si desde Colombia no hay pago, será Rueda quien deba hacerse cargo del costo resignando las deudas que aún no ha cobrado: las reducciones salariales aceptadas, además de premios y otras gratificaciones. El ente nacional, además, no quiere pagar su salario de diciembre pues fue un mes destinado a negociar con Colombia.

Todos esos motivos hacen, al menos de momento, inviable la firma del finiqutio del técnico de La Roja y es la gran razón por la que su oficialización con la selección de su país no se ha dado. Sin embargo, hay un acuerdo de palabra para que salga, pues ninguna de las partes desea continuar con el vínculo.