El gerente de la selección chilena adulta, Ian Mac-Niven, confirmó que la Roja no reconocerá el terreno de juego del Arena Fonte Nova de Salvador de Bahía, escenario del duelo de este viernes contra Ecuador y que ayer recibió el empate entre Brasil y Venezuela.

“No hemos visto la cancha, pero recibimos informes diarios de la organización. Esta zona es muy húmeda y llueve harto. Si no me equivoco en los últimos días llovió todas las noches muy fuerte. En los dos partidos anteriores ya vimos que el estado del terreno de juego está muy blando”, dijo el ex volante de Universidad Católica.

Según explica Mac-Niven, no sólo la lluvia es enemigo del gramado, sino también la ausencia de luz solar en un sector, esto pese a que el recinto deportivo fue reconstruido con herramientas y estándares modernos para la Copa del Mundo de Brasil 2014.

“La organización nos da la seguridad que estará la cancha no estará al cien por ciento, pero sí en buenas condiciones. Tiene un par de problemas porque, por la ubicación del estadio, la zona del área norte no tiene luz natural. Eso provoca que cueste recuperar el pasto”, expuso.

Sentenció que “a cualquier DT y los jugadores le gustaría reconocer la cancha, pero nos dijeron que era mucho mejor que no entrenáramos en el estadio Fonte Nova. Pero no es algo tan terrible”.