Luego de dos meses de pausa, debido al receso de verano, volvió el Grand National Cross Country, el exigente campeonato de esta categoría en Estados Unidos, con la expectativa de lo que podría realizar el piloto chileno Benjamín Herrera. 

El encuentro en el Summit Bechtel Reserve en West Virginia, Estados Unidos, terminó con un meritorio sexto lugar, en una carrera que no fue para nada fácil, con un tiempo de 2:53’36”741.

Un recorrido que se realizó en senderos nuevos, que no se había utilizado en carreras de off-road, un bosque de mucho barro, raíces y piedras, como también de grandes obstáculos para dar la bienvenida a los competidores, al igual que el chileno. 

De hecho, la carrera la ganó el estadounidense Jonathan Girroir (Gasgas) con un tiempo de 2 horas 43 minutos 55 segundos 059 milésimas, seguido del australiano Lyndon Snodgrass (Kawasaki) con 2:48’11”452. A ellos, se suma la presencia nacional de Ruy Barbosa en el cuarto lugar y con Benjamín, en el sexto puesto.

Luego de la etapa del fin de semana, Herrera sintió las dificultades del terreno: “Fue duro, es difícil volver luego de un rato porque estando en Chile el entrenamiento es distinto, hay que volver a agarrar el ritmo, y el clima es completamente distinto, pasar del frío de Chile a la humedad de  Estados Unidos, influye mucho. Pero a pesar de los inconvenientes, tomé el sexto lugar que es en absoluto malo, aunque quedo con la sensación de que puedo más y por eso iré”, puntualizó.

El piloto nacional, tres veces campeón del Red Bull Los Andes, luchará en las últimas jornadas para obtener mejores resultados, la primera de ellas el 24 y 25 de septiembre en Sunday Creek, Millfield, Ohio.