Promediando el primer tiempo del Sevilla-Barcelona por la ida de los cuartos de final de la Copa del Rey, se vivieron momentos de tensión con Arturo Vidal como protagonista tras un centro de la izquierda de los locales.

El chileno saltó con el brazo extendido para repeler el balón y le dio en el hombro generando un tiro de esquina para el Sevilla.

La jugada le quedó dando vueltas al árbitro Carlos Del Cerro, que tras escuchar las recomendaciones del VAR volvió a pitar y su gesto no fue el más claro: todos pensaron que el réferi cobrara penal por la mano del Rey Arturo.

Sin embargo, los festejos del Sevilla quedaron en nada, pues Éver Banega debió devolverse al banderín para ejecutar el tiro de esquina. ¡Vidal y el Barça pasaron un susto!