Quizás lo más polémico de todos los Juegos Olímpicos tuvo relación con la participación de Imane Khelif en el boxeo. La argelina fue denigrada por ser, supuestamente, un hombre.
Se habló de todo y fueron varios los que cayeron en la categoría de opinólogos al respecto. Sin pruebas contundentes, pero con muchas ganas de hablar, varios dieron rienda suelta a su imaginación y criticaron la participación de la boxeadora en el femenino, asegurando que era un hombre.
Pero, cada vez la información sobre el supuesto cambio de sexo de Khelif se fue haciendo más nebuloso y extraño. Apareció desmentido tras desmentido y los que tanto hablaron siguieron como caballo de carrera, haciendo caso omiso a las novedades.
Tras ganar la medalla de oro y regresar a su país, finalmente Khelif decidió tomar cartas en el asunto y emitir un comunicado asegurando que no va a tolerar las muestras de ciberacoso de las que fue objetivo.
Denuncia
La boxeadora decidió poner una denuncia ante la Fiscalía de París por “la difusión de falsedades que han afectado profundamente a Khelif”, las cuales se difundieron, sobre todo, a través de redes sociales.
Una de las que más bombo le dio al asunto fue J.K. Rowling, la autora de Harry Potter, quien dijo en reiteradas ocasiones que la argelina era biológicamente un hombre.
“Esta no es más que una muestra de misoginia y racismo en su máxima expresión”, señaló la argelina en un comunicado, en el que se apuntó a personas de renombre, como el propio dueño de X, Elon Musk.
