Si bien no es la Copa América, la Copa Oro es una de las competencias más importantes del fútbol de Norteamérica, Centroamérica y el Caribe. Es por eso que la final entre México y Panamá no dejó a nadie indiferente.

Jugada en el SoFi Stadium de Los Ángeles, esta instancia definitiva tuvo a un México muy prendido desde el inicio y provocando problemas para la defensa panameña, que había demostrado de lo que estaba hecha en la semifinal ante Estados Unidos.

La escuadra azteca pudo ponerse en ventaja a los 33′, pero el VAR quiso otra cosa. Henry Martin había anotado, pero estaba fuera de juego, por lo que el árbitro Martínez, de Honduras, lo anuló.

El tiempo pasaba y, principalmente en el segundo tiempo, ambas escuadras podían conseguir el tanto que abriera el marcador. Guillermo Ochoa fue primordial para que el arco azteca no cayera, pues cuando Panamá atacaba, creaba peligro.

Cuando todos creían que el partido tendría un tiempo extra, llegó la sorpresa azteca. Panamá atacaba con todo y descuidó la defensa, por lo que el contraataque mexicano hizo un daño terrible. Santiago Giménez no desperdició la oportunidad y clavó el único tanto del duelo (88′), uno de los más tardíos que se han anotado en la Copa de Oro.

Con esto, México se consagra campeón de la Copa Oro por novena vez, siendo el equipo más campeón del torneo en su historia. Panamá, por su parte, consiguió su tercer subcampeonato, todos los cuales han sido logrados en los últimos quince años.