Luego de que Zack Steffen y Aro Muric fueran oficializados como refuerzos de Fortuna Dusseldorf y Nottingham Forest, respectivamente, Claudio Bravo ve fortalecido su rol en el Manchester City.
Una temporada fuera de las canchas por la rotura del tendón de Aquiles en agosto pasado dejó al arquero chileno en mal pie para siquiera optar a un lugar en la Copa América.
Sin embargo, el nuevo escenario es favorable: aunque no será titular (Ederson Moraes cumplió a cabalidad en su primera temporada con los citadinos), verá minutos en la amplia agenda del club inglés.
Ederson regresará de sus vacaciones en tres semanas más, a principios de agosto o finales de julio. Con esa certeza, Bravo deberá atajar en la pretemporada y quizás, al inicio de la actividad oficial.
La competencia comenzará el próximo miércoles, con el duelo City-West Ham en Nanjing (China), por el Premier League Asia Trophy. Luego vendrán amistosos con Kitchee en Hong Kong y Yokohama Marinos en Yokohama (Japón), el 24 y 27 de julio respectivamente.
De regreso en Inglaterra, y ya con presencia de Ederson en el plantel, Manchester City disputará la copa de la Community Shield ante el campeón de Champions League, Liverpool (4 de agosto).
Será el momento de la verdad para Bravo, quien buscará ganarle la titularidad a Ederson a seis días del inicio de la Premier League, el 10 de agosto con West Ham.
El año pasado, antes de lesionarse, Bravo jugó esta definición mientras Ederson venía volviendo de su participación en el Mundial de Rusia.
De ahí en más seguirá la rotativa que Guardiola aplicó hace dos temporadas para ambos porteros. En 2017/18 el arquero chileno disputó todos los partidos de Copa de la Liga y Copa FA.
El City ingresa en septiembre a la primera y en enero de 2020 a la segunda, con un máximo de cinco rondas en cada una. Fueron nueve partidos para Bravo en 2017/18.
En cambio, Ederson tendrá prioridad en Premier League y Champions League. De todas formas, Bravo recibirá una batería de partidos que le valdrá la regularidad que espera Reinaldo Rueda.